El día domingo 14 de agosto Racing de Avellaneda y Boca Juniors se enfrentaron en el estadio Presidente Perón, conocido popularmente como El Cilindro de Avellaneda, en duelo de la jornada número trece de la Liga de Argentina.
Dicho compromiso finalizó 0-0 en el mítico escenario argentino, no obstante, en el entretiempo del mismo se vivió una situación bastante lamentable entre dos futbolistas del 'xeneize', mientras estaban en el túnel del vestuario.
Se trata de los jugadores Carlos Zambrano y Darío Benedetto, quienes empezaron a cruzar fuertes palabras y posteriormente se fueron a los golpes, eso fue lo que informó la prensa argentina. Juan Román Riquelme ídolo y actual vicepresidente del equipo 'azul y oro' se reunió con los implicados en las últimas horas y tuvo unas contundentes declaraciones sobre lo ocurrido; quiere evitar que se sigan dando más escándalos en Boca.
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"Fue un papelón. Esto no es boxeo. Son futbolistas, no boxeadores. Ustedes están buscando que los insulten. Les faltaron el respeto a la camiseta y a los hinchas. Cruzaron un límite. De lunes a sábado pueden hacer lo que quieran, pero el domingo somos todos hermanos. Ahora vamos a ver qué decisiones tomamos", esas fueron las palabras de Riquelme, que recoge el medio 'Mundo Deportivo'.
Y que asegura que ni Zambrano ni Benedetto estarían en la lista de convocados de Boca Juniors para el partido que tendrán el día miércoles 17 de agosto, contra Rosario Central en La Bombonera y que es válido por la jornada número 14 del balompié argentino.
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En los medios de la nación del mate y el tango se dio a conocer el diálogo que tuvieron tanto el defensor peruano, como el delantero argentino.
Esta sería la conversación:
"Si nosotros miramos la pelota cuando nos tiran centros, nos van a hacer el gol. Tomen las marcas", dijo Benedetto, pero Zambrano respondió con lo siguiente: "y vos por qué no metés un gol".
Después de eso vinieron los puños y los golpes en el túnel de vestuarios y todo esto quedó en evidencia cuando regresaron al complemento para el duelo contra Racing, ya que Zambrano tenía el pómulo izquierdo inflamado y Benedetto, un rasguño en el cuello.
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