La keniana Joyciline Jepkosgei ganó la maratón de Londres en 2 horas 17 minutos y 43 segundos, mientras que la prueba masculina fue para el etíope Sisay Lemma tras 2 horas 4 minutos y 1 segundo.
En unas condiciones de carrera ideales, sin sol, pero sin lluvia y con un viento moderado, los dos maratones tuvieron un alto ritmo.
Todos esperaban a la poseedora del récord del mundo y doble ganadora de la prueba, Brigid Kosgei, cuya marca era mucho más rápida que las de sus inmediatas competidoras.
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Menos de dos meses después del duro maratón de los Juegos Olímpicos de Tokio, donde se colgó la medalla de plata, a Kosgei le faltaron fuerzas al final para optar al triunfo y terminó 4ª, con un honroso crono de 2 horas 18 minutos y 40 segundos, a menos de un minuto de su compatriota Joyciline Jepkosgei.
Vencedora del maratón de Nueva York el año pasado, Joyciline Jepkosgei fue la más sólida. En la parte final dejó atrás una a una a las otras cuatro componentes de un grupo de cinco que había tomado rápidamente el control de la carrera.
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Su última aceleración a 7 kilómetros para meta le permitió quedar por delante de las etíopes Degitu Azimeraw, 2ª a 15 segundos, y Ashete Bekere, tercera a 35 segundos.
En categoría masculina, la prueba se endureció rápidamente, algo que no benefició al etíope Shura Kitata, campeón el año pasado al esprint con un segundo de ventaja sobre el keniano Vincent Kipchumba y tres sobre Sisay Lemma, quien se tomó la revancha.
Tocado en los aductores antes de los Juegos Olímpicos, donde tuvo que abandonar, Kitata se descolgó pronto, afrontando el maratón a distancia del grupo de cabeza para terminar 6º a casi cuatro minutos de su compatriota.
Sisay Lemma, que dio una sensación de soltura durante toda la carrera, ganó por delante de Kimpchumba, otra vez 2º aunque esta vez a 27 segundos, y de otro etíope, Mosinet Geremew, 3º a 40 segundos.
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Una vez cruzó la línea de meta, Sisay Lemma se tiró al suelo completamente estirado después de su gran esfuerzo.
Es el primer triunfo en un gran maratón para Sisay Lemma, que se quedó cerca de superar su mejor marca personal firmada en Berlín en 2019 con 2 horas 3 minutos y 36 segundos.
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