Italia entera amaneció con frustración y decepción tras la eliminación del Mundial Catar 2022

"Los Azzurri en shock": derrumbe colectivo o responsabilidad del entrenador, la prensa italiana hace balance el día después de la eliminación de Italia del Mundial-2022, sinónimo del "adiós a la Nazionale" en su forma actual.

"Todo el mundo a casa", titula La Repubblica, estimando que la derrota del jueves por la noche en Palermo contra Macedonia del Norte (1-0) significa el "adiós a una Nazionale perdida para siempre".

La Stampa señala un "rendimiento desastroso" de los jugadores de Roberto Mancini, que solo enviaron cinco de sus 32 tiros entre los tres palos, mientras que los macedonios lograron el gol en uno de su cuatro tiros del partido.

Para el gran diario turinés, la eliminación de Italia, tetracampeona del mundo (1934, 1938, 1982 y 2006) y vigente campeona de Europa, anuncia "un cambio generacional" y una "refundación".

La Gazzetta dello Sport no encuentra motivos para sorprenderse: "La Eurocopa ganada fue un feliz paréntesis entre años de decepción para la selección y los equipos", a media asta tanto deportiva como económicamente.

"Nuestro fútbol paga un precio enorme: falta visión y no hay valor. Juzgar a Mancini sería un error, hay que revisar todo el sistema Calcio", analiza el diario deportivo.

De hecho, Mancini, en principio podría mantenerse en el puesto. El seleccionador prolongó su contrato hasta 2026 el año pasado y parece protegido por su victoria en la Eurocopa.

"La hora de las responsabilidades" ha llegado, truena sin embargo Il corriere dello Sport. A pesar de las bajas (especialmente la del atacante Federico Chiesa), el director del diario Iván Zazzaroni, próximo al seleccionador italiano, no encuentra ninguna circunstancia atenuante: "Mancini fue el artesano del triunfo europeo, Mancini es el primer responsable de este fracaso".

"Ninguna sorpresa", recuerda Il Messaggero, "tan solo la consecuencia de años en caída libre". "No ganamos a nivel de equipos ninguna competición europea desde 2010, una escasez tan larga como inédita en la historia de las copas europeas".