De Giovanni Hernández quedaron los recuerdos de su calidad, visión de juego y hasta goles puestos al servicio de clubes como Once Caldas, América, Cali, Medellín y Junior, en nuestro país, en Colón, de Argentina, y Colo Colo, de Chile, e incluso en selecciones Colombia de diferentes categorías.
Sin embargo, y en medio de una personalidad reservada y lejana de los medios, muy pocas veces se había visto al exfutbolista con el corazón abierto y dando un repaso a su vida más allá de las canchas, que en realidad no fue color de rosa.
Y es que en el programa 'Se dice de mí', de 'Caracol Televisión', de este sábado el llamado 'Príncipe' reveló dificultades que tuvo que superar, en una niñez y adolescencia en barrios de Cali complicados y de ambiente pesado.
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"Siempre estuve en un entorno difícil. Donde vivía siempre fue pesado. Veía por ahí personas raras y ofrecían cosas", indicó con sinceridad Hernández.
Además, el vallecaucano agregó que "tenía amistades con drogas, con cosas. Personas que decían vamos a tal lado o a tal otro. Me decían otros, probá un cacho de marihuana, pero yo decía no, yo quiero es jugar".
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Pero ese tema de las drogas también tocó la puerta de su casa, ya que ese problema afectó a Edison Hernández, su padre.
"Yo conté la faceta buena de él, la faceta mala no. Mi papá empezó a consumir droga. Él era mariguanero. Cuando estaba normal, era muy ‘bacano’. Pero consumía eso y había que correr. Agarraba lo ajeno. Se llevaba las cosas", finalizó Giovanni Hernández, a quien también le recrearon momentos dulces de su carrera futbolística, se recogieron testimonios de sus entrenadores y familiares.
El vallecaucano, que debutó como profesional en el Once Caldas de Manizales a los 17 años gracias a Carlos ‘El Piscis’ Restrepo, fue campeón con la Selección Colombia en la Copa América 2001 y no dudó en elegir su técnico preferido.
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“Sin duda Francisco Maturana, él me dio la oportunidad de estar en el único título que tiene el combinado nacional a nivel mayores”, confesó.
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