El héroe de Gales , Gareth Bale, saldrá al campo del estadio Ahmad Bin Ali el viernes en busca de una victoria sobre Irán que tendrá efecto doble: acercar a los 'Dragones' a octavos de final y eliminar a los iraníes del Mundial de Catar.
Los europeos precisan de los tres puntos después de empatar (1-1) con Estados Unidos el lunes, en su estreno en el Grupo B. También en el Ahmad Bin Ali de Doha, el ex Real Madrid puso la paridad, de penal, en el primer juego mundialista de su equipo nacional desde 1958.
El resultado consolidó una tendencia en la corta experiencia galesa en las Copas del Mundo: cuatro juegos, cuatro empates.
Pero si la mejor generación galesa, capaz de llevar a esta nación de tres millones de personas a dos Eurocopas seguidas y a su segundo Mundial, quiere seguir asombrando, va a necesitar dar un paso más contra los asiáticos (13H00 locales, 10H00 GMT).
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Alta de Allen
"Aprendimos lecciones del partido (ante los estadounidenses). Fue muy importante no haber perdido el juego", dijo el seleccionador Rob Page. "Nos estamos preparando para un partido difícil y luego veremos cómo llegamos a nuestro último juego con Inglaterra".
Los ingleses pulverizaron 6-2 al Irán del portugués Carlos Queiroz y tomaron la punta del Grupo B.
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Page ha reconocido el favoritismo de los 'Three Lions' y ha posicionado a Estados Unidos como el llamado a ocupar el segundo puesto.
Como están las cosas, la lucha es mano a mano entre galeses y norteamericanos, que se enfrentarán a Inglaterra la noche del viernes en el estadio Al Bayt.
Además de chocar con un rival que emocionalmente puede estar disminuido, los 'dragones' pueden celebrar el regreso a los entrenamientos de Joe Allen (Swansea, ENG), quien superó una lesión en el tendón que lo tuvo fuera de las canchas desde mediados de septiembre.
La presencia del volante de 32 años, indiscutible en el clasificatorio, puede aliviar un mediocampo que sufrió para controlar a los estadounidenses.
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Todo o nada
El sueño iraní de clasificarse por primera vez a octavos en su sexta participación en un Mundial pende de un hilo.
El baño de agua helada contra la Inglaterra de Harry Kane dejó muy magullado al equipo de Queiroz, quien además para el choque contra los galeses probablemente perderá a su portero titular, Alireza Beiranvand.
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Beiranvand chocó con su compañero, el defensor Majid Hosseini, en el cotejo contra Inglaterra y dejó el campo en el minuto 20 por una "seria contusión", afirmó el DT. Hossein Hosseini lo reemplazó y encajó los seis tantos.
Queiroz puede apostar de nuevo por él o por alguno de los otros dos guardametas que incluyó en la lista de 25 jugadores: Payam Niazmand, con apenas un juego internacional, o Amir Abedzadeh, con once.
Sea quien sea el elegido, Irán, que aterrizó en Catar en medio de la convulsa situación política en su territorio, necesita sumar para llegar con vida al último juego ante Estados Unidos, un choque cargado de tensión diplomática.
"Solo puedo decir que ganamos o aprendemos. Tuvimos el privilegio de aprender muchísimas cosas del equipo inglés y ahora estamos mucho mejor preparados para enfrentar a Gales", aseguró Queiroz.
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