"Vuélvanlo a convocar a la Selección Colombia", "me ha hecho un mejor entrenador", "siempre quiere ganar", "es un gran ejemplo", "lidera, guía y potencia a los más jóvenes", estas son tan solo algunas frases de hinchas, técnicos y compañeros, para referirse a Teófilo Gutiérrez, figura de este Deportivo Cali que se consagró campeón.
Poco más de seis años tuvieron que pasar para que el cuadro 'azucarero' volviera a bordar una estrella en su escudo. Por eso, es apenas normal la algarabía y locura que se vive. Justamente, en medio de estas desaforadas celebraciones e incluso antes de esta locura que se desató por el título, no han parado de corear: "'Teo', 'Teo'".
¿Por qué? Razones hay de sobra para justificar estas muestras de cariño y agradecimiento hacia el nacido en Barranquilla, a quien le bastaron unos cuantos meses para ganarse los corazones 'azucareros'. ¿Adaptación? Esa palabra jamás existió en el vocabulario de este futbolista, hecho para ganar y decidido a dejar huella a donde vaya.
Lo que sucedió con el cuadro vallecaucano no fue nada nuevo. País al que fue, país en el que al menos sumó una medalla a sus vitrinas. Turquía (Trabzonspor), México (Cruz Azul), Portugal (Sporting Lisboa), Argentina (River Plate) y ni hablar de lo que ha hecho en Colombia, primero con el Junior de Barranquilla y ahora con Cali.
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Si suena el nombre de Teófilo Gutiérrez, de inmediato se relaciona con el 'tiburón'. Una Copa Colombia, dos Ligas, misma cantidad de Superligas, 265 partidos disputados, 94 tantos marcados y 36 asistencias, todo un ídolo. En la primera división del fútbol colombiano, nunca había jugado en un club diferente al barranquillero.
Por eso, tras confirmarse su arribo al 'azucarero' de cara a la Liga II-2021, cuestionamientos como ¿rendirá? ¿con 36 años, podrá? ¿funcionará? ¿será la solución? no se hicieron esperar. Esas preguntas, con el paso de los juegos, fueron resueltas y, ahora, con el campeonato aún más, para quienes todavía dudaban.
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En silencio, pero con trabajo duro y haciendo de las suyas en el terreno de juego, pero también afuera de ellos, durante los entrenamientos, terminó el segundo semestre del 2021, con nuevo equipo, 25 partidos disputados, nueve goles, un título a su lista, gritando 'campeón' y volviendo a hacer historia.
Fue el eje del equipo en la cancha, oficiando como creativo, finalizador, organizador, en pocas palabras, el mandamás en el terreno de juego. Basta con ver la escena previa a que se cerró el telón, con la banda de capitán sobre su brazo izquierdo y con el trofeo entre sus manos, una imagen usual y que, de seguro, se volverá a repetir.
"Quiero salir campeón con el Cali. Es una institución que me ha abierto sus puertas, me ha tratado bien y estoy agradecido por eso", fue el mensaje claro y contundente de Teófilo Antonio Gutiérrez Roncancio cuando recién fue presentado. Este miércoles 22 de diciembre, cumplió a cabalidad cada una de estas palabras.
'Teo' es un distinto, un jugador especial, esa ficha que todos quisieran tener entre sus filas, pero que solo uno puede darse el lujo de tenerlo y que, por la misma razón, aprovecharla al máximo es fundamental para estar siempre un escalón arriba de los demás. Deportivo Cali lo hizo, se la jugó y ahora celebran.
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