
Jorge Bolaño murió esperando cumplir sueño con Junior de Barranquilla; “se va a dar”, decía
El exfutbolista del cuadro ‘tiburón’ y de la Selección Colombia falleció sin que llegara el momento que tanto anhelaba y para el que se había alistado.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Jorge Bolaño , que se desempeñaba como entrenador de fútbol juvenil, fue víctima de un infarto que lo sorprendió a los 47 años de edad, mientras estaba en Cúcuta.
Pese a que fue mundialista en Francia 1998 y aunque tuvo una brillante carrera en Europa y Colombia, no alcanzó a cumplir uno los sueños que tenía y para el que se venía preparando, pues estaba seguro de que el momento le llegaría y no lo quería desaprovechar.
El popular ‘Bolañito’ siempre se consideró hincha de Junior de Barranquilla y nunca escondió su deseo de volverá la institución rojiblanca. Sin embargo, el tiempo no le fue suficiente y su pronta partida dejó ese anhelo por cumplir.
Publicidad
Jorge Bolaño murió esperando perder sueño con el Junior
El exmediocampista había seguido ligado al fútbol después de su retiro de las canchas, ya que se empezó a capacitar para ser director técnico y así ejercer ese cargo en el club de sus amores.
Publicidad
“Para nosotros, que estuvimos y somos hinchas del Junior, es nuestro sueño dirigir al club”, manifestó pocos días antes de su fallecimiento, en declaraciones entregadas al medio 'Habla Deportes'.
Y agregó que tenía fe en que su día iba a llegar: “En cualquier momento se va a dar. Lo importante es que cuando se dé el chance, estemos preparados”.
En ese sentido, señaló que iba por buen camino para semejante responsabilidad, pero lamentablemente el tiempo no le alcanzó: “Porque ser técnico del Junior no es fácil, no es de decir: 'Dámelo y yo ve qué hago'. Siento que va a haber el momento”.
En su camino como timonel pasó como asistente por el equipo de la Universidad Autónoma del Caribe y por la Selección Colombia Sub-17.
Publicidad
Además, tuvo una experiencia en Venezuela con el club de segunda división Real Frontera, de San Antonio del Táchira, pero nunca alcanzó a dar el gran saltó a la máxima categoría del fútbol profesional.
De hecho, cuando no tuvo club, se dedicó a ser comentarista como panelista invitado a programas de televisión, donde hizo que su nombre no se fuera al olvido.