Águilas Doradas y la disputa directa por su permanencia en la ciudad, contra el alcalde de Rionegro

La actual situación entre Águilas Doradas y el alcalde de Rionegro, Rodrigo Hernández Alzate, cada día se pone más tensa, después de que haya sido el mismo político quien, a toda costa, esté tratando de sacar del estadio al conjunto antioqueño por medio de diferentes denuncias. Frente a esta compleja situación, el presidente de veedurías, Pablo Bustos, charló con ‘Blog Deportivo’ de ‘Blu Radio’ y explicó las medidas y consecuencias que esto conlleva para el club.Denunciados y sometidos a alejar la sede deportiva y el estadio de ahora en adelante, Águilas Doradas disputa sus derechos en un ámbito local, que, mientras define la situación, siguen en una disputa directa con el alcalde de Rionegro, quien no cede y ya afectó al equipo por no permitir la correcta realización del encuentro frente a Atlético Nacional, por la segunda jornada de la Liga II-2023 del fútbol colombiano.“Rodrigo Hernández Alzate, en una ‘alcaldada’ quiere echar por la borda lo que es el derecho al deporte y a la recreación, que no solo incluye a los directivos y al equipo, sino que también a sus hinchadas del fútbol colombiano. Lo que está pasando es que, a pocos días de entregar su mandato, el alcalde Rionegro, a través de la corregidora sur, Sandra Gutiérrez, ya ha emprendido una querella policiva para expulsar a Águilas Doradas, que tiene los derechos exclusivos para presentarse en el estadio Alberto Grisales, que es parte de un inmueble del municipio y en cualquier momento serán expulsados de su lugar de entrenamiento”, indicó inicialmente Pablo Bustos, en charla con ‘Blog Deportivo’ de ‘Blu Radio’.Sumado a eso, el presidente de las veedurías presentó las graves consecuencias y las afectaciones directas que esto tiene para el conjunto antioqueño y fútbol colombiano: “No es posible tener un cuadro competitivo a nivel profesional, cuando el país considera el deporte y recreación un derecho fundamental y un alcalde lo está expulsando, después de tener un contrato vigente para el estadio Alberto Grisales hasta diciembre y sin embargo, no los deja entrenar, los quiere sacar, es una ‘alcaldada’ que ha venido ofreciendo el mismo estadio a otros equipos profesionales y eso viola la normal oficial de la DIMAYOR”.*Otras declaraciones:¿Qué medidas están tomando ustedes como organismo intermediario?“La red de veedurías está pidiendo por las medidas de urgencia que se respeten los derechos deportivos de manera inmediata a este equipo. No es posible tener un estadio en uno de los barrios autorizados y competir sin entrenar; el alcalde quiere forzar al equipo sin el uso de la sede deportiva, que además la venía rentando por siete de años de manera consecutiva, no es que el equipo se haya metido en una zona del municipio, sino que hay contratos”.¿Hay justificaciones legales de esos convenios?“En los últimos años Águilas Doradas tiene contratos de arrendamiento cumplidos hasta febrero pasado, en las que el alcalde ha tratado de sacarlos por los diferentes medios. Esto no afecta solo al equipo, sino a su entorno, a las más de 550 personas, hoteleros, vendedores ambulantes, personas de derechos televisivos”.¿Cómo ha afectado el alcalde de Rionegro al equipo?"Rodrigo Hernández Alzate no permitió la realización del encuentro pasado frente a Atlético Nacional. Esto ha sido objeto de desacatos, se han violado una serie de derechos deportivos”.¿Qué medidas legales han tomado ustedes?"Después de que el alcalde impusiera la acción en la Corregiduría, en las últimas horas, nosotros como red de veedurías también hicimos nuestra petición en Medellín ante un juez”.