Fue compañero de Faustino Asprilla en el mejor tiempo de Parma y ahora vende aspiradoras

En el mundo del fútbol siempre quedan historias para enmarcar de todo tipo, especialmente cuando los jugadores dejan su carrera deportiva, se alejan de todos los focos mediáticos y pierden fama y reconocimiento. Y en las últimas surgió una historia que tiene como protagonista a un talentoso, de esos de rica técnica, claridad e imaginación a toda prueba y que compartió en el mejor tiempo de Parma, de Italia, con el colombiano Faustino Asprilla. Esa nómina que dirigió Nevio Scala dejo gratos recuerdos, tanto así que aún cuando esas viejas estrellas llegan a la ciudad aún son reconocidos y admirados por los hinchas.Acá nos referimos al sueco Tomas Brolin, quien en las últimas horas ocupó un espacio en el portal deportivo 'Tuttosport'. Dicho medio contó la increíble historia del delantero, que en primera medida decidió retirarse del fútbol antes de los 30 años y cuando muchos creían que tenía aún cualidades para seguir en los terrenos de juego.Así, Brolin decidió dejar toda cercanía con el mundo del balompié, no se inclinó por ser entrenador, ni tampoco ocupar cargos administrativos dentro de algún equipo; el sueco, hoy con 53 años, se dedicó a vender aspiradoras, tal y como lo puntualizó el referido medio italiano."Todo el mundo dice que 28 es demasiado joven para retirarse, pero depende de lo que hiciste en tus 28 años como futbolista. Yo había hecho mucho", declaró en algún momento el nacido en Hudiksvall, un 29 de noviembre de 1969.En otro de los apartados de la nota se complementó que "el sueco, una vez finalizada su carrera deportiva, cambió su perspectiva vital tras conocer al inventor Goran Edlund . De hecho, su compatriota había inventado una boquilla de aspiradora más ligera y eficaz: una nueva herramienta en la que el exfutbolista decidió invertir. Posteriormente, Brolin también se convirtió en socio al 50% de Twinner, una empresa ahora líder en el mercado sueco que se ocupa de la venta de aspiradoras".Para recordar que Asprilla, Gianfranco Zola, y el propio Brolin integraron un tridente de ataque que se ganó elogios y una admiración de los fanáticos del Parma.