La directora ejecutiva de la Asociación de Jugadores de la NBA (NBAPA), Malika Tremaglio, pidió este viernes que el dueño de los Phoenix Suns, Robert Sarver, sea sancionado "de por vida" después de que una investigación demostrara que tuvo un comportamiento abusivo con sus empleados.
Tremaglio aseguró que, tras el resultado de la investigación, está "claro" que los jugadores no quieren que Sarver "ocupe esa posición" en los Suns, en una entrevista a la cadena 'ESPN'.
"Queremos dejar muy claro que no queremos que regrese a una posición que afecte a los jugadores o a los empleados que trabajan a diario con los jugadores", agregó.
La NBPA informó además de que "los jugadores están increíblemente disgustados por lo sucedido" y manifestó su apoyo a las familias que se han visto afectadas por el comportamiento de Sarver.
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La NBA anunció el martes que ha sancionado a Sarver, propietario de los Phoenix Suns y de las Phoenix Mercury de la WNBA, con un año de suspensión y una multa de 10 millones de dólares por comportamiento abusivo en el entorno laboral y trato vejatorio a sus empleados.
Esta sanción, la máxima establecida en las reglas internas de la liga, es el fruto de una investigación de la NBA surgida a partir de un reportaje de ESPN publicado en noviembre de 2021, que había hablado con más de 70 trabajadores y exempleados de Sarver que le acusaron de racismo y machismo dentro de un ambiente laboral tóxico.
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Sarver es también el máximo accionista del Mallorca del fútbol español.
En los últimos días, jugadores como LeBron James, de Los Ángeles Lakers, o Chris Paul, de los propios Suns, expresaron su disgusto por lo sucedido y consideraron insuficiente la medida tomada por la NBA.
"Bajo mi punto de vista, las sanciones son insuficientes para condenar el que todos consideramos como un comportamiento atroz. Mi corazón está con todas las personas afectadas", escribió Paul.