Recién empezaba el año y el deporte colombiano ya nos regalaba una de las mayores alegrías no solo del 2023, sino de la historia. Las responsables fueron las elegidas por el entrenador Rafael Iznaga. Un total de nueve boxeadoras viajaron a Nueva Delhi, ciudad de la India, con la ilusión de figurar en el Mundial y sí que lo hicieron.
María José Martínez, Yeni Arias, Ingrit Valencia, Valeria Arboleda, Angie Valdés, Shirleidis Orozco, Camila Camilo, Luisa Vásquez y Angie Solano representaron de la mejor manera a nuestro país. Cada vez que subieron al cuadrilátero, lo dejaron todo y nunca negaron ni una gota de sudor. Había hambre de gloria y esto dio sus frutos.
Del 15 al 31 de marzo, se vivieron dos semanas intensas, llenas de lágrimas, sudor, baile y muchas emociones. Y es que, detrás de las 15 victorias y ocho derrotas, números que permitieron ser séptimos en el balance final, había historias por contar.
Camila Camilo fue una de las gratas revelaciones. Llegó a semifinales, donde cayó 4-1 frente a la pugilista rusa Nataliya Sychugeva, pero obtuvo medalla de bronce en la categoría de los 63 kilogramos. Este fue el producto de mucho esfuerzo y dedicación.
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Caracol Sports tuvo la oportunidad de vivir dicha pelea, junto a Rebeca Bravo, madre de la deportista. Allí, en una mesa, en la sala de su casa, montó su propio ring. Ante la falta de un televisor, se sentó junto a su otra hija Elaine, a verlo todo en un celular.
Como ella bien lo dijo: "No tengo televisor porque hay otras prioridades, que es apoyarla y quiero, por ahora, terminar de construir el baño. Si me compro un televisor, no tengo para lo otro"; en una muestra de cómo les ha tocado en la vida.
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Situación similar ocurrió con Angie Valdés, que se llevó la presea de plata en la categoría de los 60 kilogramos. Además de que por poco termina representando a Azerbaiyán, vivió un duro momento con su mamá. Así lo contó en rueda de prensa.
"La Selección Colombia nada más llamaba al primer y segundo lugar; yo no quedé en ninguno. Un entrenador me propuso ir a Azerbaiyán y me iban a dar 1.200 dólares mensuales, con lo que podía ayudar a mi familia. Aquí no había tanto apoyo”, contó.
Pero no fue lo único. “En ese momento, mi mamá estaba presa y se me dio esa oportunidad. Cuando llegué a ese país, me compraron lo que necesitaba, me atendieron y me consignaron lo que habían prometido; todo era bueno”, añadió.
"Ya contaba con la nacionalidad y estaba todo listo. Pero cuando se contactaron con el profesor Rafael Iznaga y con la Federación Colombiana de Boxeo, enseguida hicieron un llamado, pidieron que regresara a Colombia y aquí estoy”, sentenció.
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Y las otras alegrías llegaron por cuenta de nuestras más experimentadas, referentes y que nos han regalado cuanto título, podio o reconocimiento han podido. Estamos hablando de Ingrit Valencia y Yeni Arias. Ambas son, sin duda, unas ‘campeonas’.
La risaraldense cayó a manos de Huang Hsiao-Wen, representante de China Taipei, que aprovechó su altura para dominar en los tres asaltos a la colombiana. Al final fue una victoria por decisión unánime. Pero Yeni Arias se hizo con la medalla de plata.
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Por otro lado, Ingrit Valencia se subió al tercer cajón en la división de los 50 kilogramos, sumando un bronce importante. La nacida en Morales, Cauca, confirmó, una vez más, que es una de las máximas exponentes del boxeo femenino colombiano.
Al final, se firmó la mejor presentación en la historia de los mundiales de boxeo. Se ocupó la séptima casilla, siendo la mejor delegación sin oros. Con dos platas y dos bronces quedó por encima de potencias como Kazajistán, Francia y Corea del Sur.
Gracias, les decimos, y no solo a Ingrit Valencia, Yeni Arias, Camila Camilo y Angie Valdés, ganadoras de medallas, sino a todas (María José Martínez, Valeria Arboleda, Shirleidis Orozco, Luisa Vásquez y Angie Solano). Son todo un motivo de orgullo.
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