Roberto D'Aversa, entrenador del Lecce , agredió este domingo al francés Thomas Henry, jugador del Hellas Verona , nada más finalizar el duelo entre ambos equipos que acabó con victoria del conjunto veronés (0-1), un resultado que compromete la situación de un Lecce cada vez más cerca del descenso.
El técnico italiano, nada más terminar el partido, se dirigió a Henry y le asestó un cabezazo que le costó la tarjeta roja directa. El jugador, que se marchó a vestuarios con una marca en un pómulo fruto del golpe, terminó también expulsado por la tangana que se generó tras el encuentro.
El Lecce se desmarcó completamente del acto de su entrenador con un comunicado oficial.
"En referencia al episodio entre el entrenador D'Aversa y el jugador del Verona Henry, evaluando la situación de nerviosismo general al final del partido, el Lecce condena firmemente el gesto de su entrenador por ser contrario a los principios y valores del deporte", escribió el club.
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D'Aversa de disculpó en redes sociales, aunque aseguró que no fue un cabezazo.
"Me gustaría pedir disculpas a todos y al mismo tiempo reconstruir brevemente el triste y desagradable episodio en el que tuve un papel negativo al final del partido Lecce-Verona. Entré en contacto cabeza con cabeza con Henry, pero no golpeé al jugador del Verona con la cabeza, ni recibí ninguno de él. Fue un contacto físico, un muy mal ejemplo, una imagen antideportiva nacida de la gran tensión y la adrenalina, pero no debe ser ni será mi excusa o atenuante. Me equivoqué y pido disculpas", publicó en su Instagram.
Roberto D'Aversa, entrenador del Lecce, le ha dado un cabezazo a Thomas Henry, delantero del Verona, al final del partido.
— Jose Rodríguez (@JosRodriguez37) March 10, 2024
Los dos acabaron después expulsados. Todo viene por la tensión que había entre Henry y Pongracic en los minutos finales del encuentro. https://t.co/RaRoYJDHpY
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"Me dejé llevar por el calor del momento y perdí la lucidez, pero no hasta el punto de golpear a otra persona. Esto no me pertenece, lo rechazo y no lo acepto. Una vez más pido disculpas a Henry, al público de Lecce, Verona e Italia, a los árbitros, a los dos clubes, a mi directiva, a mi personal y a mi equipo", añadió el técnico.
Antes, a los micrófonos de DAZN, ya dejó claro que había cometido un error.
"El encontronazo con Henry aseguro que no fue premeditado. Ya he pedido disculpas a los dirigentes del Verona: como entrenador y padre de tres hijos, pido perdón por el gesto, que desde luego no fue agradable de ver", comentó.
El técnico queda a la espera de una sanción, que podría ser ejemplar al haber imágenes de lo ocurrido en el Estadio Via del Mare de Lecce (sur).
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