Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Push Gol Caracol
Reciba nuestras notificaciones con lo último de:
No, gracias.
¡Claro que sí!

Publicidad

Draymond Green y su final aparte en la NBA: continúan los insultos de los hinchas de Boston Celtics

Desde que comenzó la serie, el jugador de los Warriors ha sido víctima de abucheos por parte de los aficionados rivales.

draymond-green-nba
Draymond Green, jugador de la NBA.
/Getty Images

Si Draymond Green fue la principal víctima de los cánticos del TD Garden de Boston en el tercer partido de las Finales de la NBA, el pasado viernes volvió a repetirse la dosis y mostraron actitudes reprochables en contra del jugador de los Golden State Warriors.

"Lanzar insultos en medio de niños en las gradas. Buen trabajo, Boston. Muy elegante", aseguró el deportista al criticar la actitud del público en una rueda de prensa de la víspera, al comentar la forma en la que muchos aficionados lo increparon en el tercer partido.

"¡De ninguna manera se debe permitir que los aficionados canten obscenidades a los jugadores! ¿No son humanos? ¿Hay alguien parado delante de ti en tu trabajo diciéndote cosas así?", afirmó la esposa de Draymond Green, por medio de las redes sociales.

Ante los evidentes y ruidosos insultos escuchados en el tercer encuentro de la serie, la megafonía del Garden pidió este viernes a la afición local mantener un comportamiento respetuoso, amenazando con sanciones a quienes no cumplieran con las reglas.

Publicidad

Sin embargo, cuando los Warriors saltaron a la pista del Garden a calentar, empezaron a escucharse los primeros insultos a Green, seguidos por sonoras pitadas a Klay Thompson, mucho más intensas que las dedicadas a otros integrantes de los rivales.

También durante el partido, los aficionados locales increparon a Green y abuchearon a Thompson, aunque en su caso no hubo cánticos con insultos.

Publicidad

En ese contexto, las pantallas gigantes del Garden volvieron a avisar a la afición de que se prohíbe "usar lenguaje y gestos ofensivos" y que las consecuencias incluyen "expulsión del estadio, prohibición de acceder a recintos deportivos o arresto".

Draymond Green, el enemigo número uno de los Celtics, destacó al acabar el tercer partido que recibir ese tipo de trato le motiva. "Me gusta que se me pite. (...) Es algo que me gusta, pierden muchas energías hablando de mí, es bueno. Estoy ansioso por el viernes", aseguró.

  • Publicidad