El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, ha explicado, tras ganar al Real Valladolid por un contundente 2-5, que el conjunto blanquivioleta "es un equipo que juega con pasión y entrega y, por tanto, el partido ha sido el que se esperaba".
En su opinión, el hecho de que en la segunda mitad dominase el cuadro local "no ha sido un tema de nervios, porque se había estado contundente en la primera parte, pero el penalti metió al Valladolid en el partido, con toda la segunda parte por delante".
"Ahí empezó otro capítulo, y nosotros no pudimos, hasta el 3-2, generar un contragolpe que nos permitiera cerrar el partido, pero apostamos por Correa y Memphis para que, en esas idas y vueltas, hubiera gente con capacidad para aprovecharlo, y todos corrieron bien, haciendo los goles", ha analizado en rueda de prensa.
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En cuanto al estado de forma de todos los delanteros, ha apuntado que agradecía que "todos estén preparados para responder cuando el equipo les necesita, tanto en el caso de Griezmann, como de Álvaro, Ángel y Memphis".
También, preguntado por la importancia de los carrileros, ha indicado que tanto Molina como Carrasco "son jugadores que aportan profundidad, gol y también trabajo defensivo, lo que es muy difícil de hallar, y ambos están en un buen momento, porque tienen recorrido, llegada, asistencia y se han ganado su lugar".
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Por último, ha advertido, respecto a los centros laterales del rival que "cuando se sale tarde, a destiempo y apurado, el otro aprovecha para encontrar el espacio y sacar el centro, y el Valladolid lo hizo bien".
"En la segunda mitad pudieron hacerlo también, y no es fácil interpretar el partido según se está desarrollando", ha añadido, tras sumar un nuevo triunfo, que deja al Atleti a dos puntos del Real Madrid.