Goiás cedió este jueves en casa un empate sin goles frente a Gimnasia y Esgrima que dejó al conjunto argentino eliminado y al brasileño aún invicto y provisionalmente como líder del Grupo G de la Copa Sudamericana, pero con su clasificación a octavos de final amenazada.
El resultado premió a un equipo brasileño que tan sólo alineó dos titulares debido a que está más preocupado con su situación en la Liga brasileña, en la que está en la zona de descenso, y que jugó gran parte del segundo tiempo con diez jugadores por la expulsión del delantero Ariel.
El conjunto comandado por el técnico Emerson Avila sigue liderando el grupo, con 9 puntos, pero puede perder su posición este mismo jueves en caso de que el Universitario peruano (7 puntos) se imponga a domicilio al Santa Fe colombiano (4 puntos).
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En cualquier caso su liderazgo y su posible clasificación a octavos va a depender del resultado que consiga en la visita que hará al Santa Fe en la altura de Bogotá en la última jornada de la fase de grupos.
El empate en partido disputado ante 7.928 aficionados en el estadio de Serrinha de la ciudad de Goiania dejó automáticamente eliminado al conjunto de La Plata, que fue comandado en el banquillo por Nicolás Cabrera debido a que el técnico Sebastián Romero tuvo que cumplir una fecha de suspensión por expulsión.
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Con el conjunto local copado de suplentes y el visitante sin mucho interés, ninguno de los dos equipos amenazó al rival en los primeros minutos, en que el partido se jugó en el centro de la cancha.
Goiás se acercó con dos tiros de esquina y Maximiliano Comba hizo el primer disparo peligroso para el Lobo a los 16 minutos del primer tiempo.
Tres minutos después, tras jugada de Maguinho, Guilherme Marques recibió libre dentro del área y pateó sin puntería en la primera opción de gol de los brasileños.
Morelli, con un cabezazo atajado por el portero Tomás Durso; Sidimar, con un remate de cabeza que pasó raspando un poste, y Gabriel Novaes, que por poco abre el marcador a los 27 minutos, dejaron claro que el Goiás había asumido el dominio del partido.
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Cristian Tarragona, que finalizó por encima del travesaño del portero Tadeu a nueve minutos del final del primer tiempo, también dejó claro que el equipo de La Plata asustaría con los contragolpes.
Sin muchas opciones, con excepción del balón que Alesson estrelló en el travesaño en los minutos de reposición, los rivales se fueron a las duchas tras una primera mitad en la que el Goiás tan sólo finalizó cuatro veces y el conjunto argentino dos.
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Goiás comenzó presionando en el segundo tiempo y a los 4 minutos el árbitro boliviano Ivo Méndez le concedió un penalti luego de que un balón de Bruno Santos chocara en el brazo de Ignacio Miramón dentro del área. Pero, tras consultar el VAR, el referí se retractó para desespero de los hinchas locales.
Diez minutos después Hugo invadió el área del Gimnasia y eludió a dos marcadores pero su disparo llegó sin fuerza en las manos de Durso. Y Maguinho y Ariel también desperdiciaron claras oportunidades tras recibir dentro del área y prácticamente sin resistencia.
A los 66 minutos Goiás se quedó sin un jugador por la expulsión de Ariel por una jugada peligrosa y Cabrera aprovechó para reforzar el ataque del Lobo con tres cambios, incluyendo la entrada del extremo Benjamín Domínguez, que estuvo dos meses alejado de las canchas por una lesión que le impidió disputar el Mundial Sub'20 con Argentina.
Pese a la fuerte presión en los últimos minutos de un desesperado Gimnasia, al que sólo le interesaba la victoria para no ser eliminado, el Goiás en desventaja numérica reforzó su sector defensivo y consiguió administrar el empate hasta el final del partido, que al menos lo mantiene como líder.
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