Jhon Jáder Durán solo ha sido titular en 2 de los 12 partidos de la presente temporada y ya acumula 7 anotaciones, la mayoría de ellas, definitivas. De hecho, en los 404 minutos que ha podido actuar ha consolidado un promedio envidiable: manda el balón al fondo de la red cada 57 minutos.
Su nivel lo tiene como el nuevo ídolo del Aston Villa , ya que no solo brilla con lujo de detalles en Premier League, también lo hace en Champions, pues le dio la victoria a su escuadra frente al Bayern Múnich de Alemania y contra el Bologna de Italia fue galardonado como el mejor jugador.
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Su brillante presente hace que incluso le aplaudan la pataleta que hizo cuando fue sustituido después de su gol al Bologna, cuando pateó y golpeó las sillas del banco de suplentes porque no quería salir de la cancha.
En ese sentido, el diario británico ‘Birmingham Live’, especializado en la información del elenco ‘villano’, se regó en piropos hacia el ‘cafetero’ por su actitud.
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Rabieta de Jhon Jáder Durán enamora en Aston Villa
John Townley, periodista encargado de cubrir las noticias del equipo del atacante antioqueño, publicó un particular editorial inspirado en el jugador de 20 años de edad, al que proyectó como figura de talla internacional.
En ese sentido, afirmó que la pataleta que hizo en Champions cuando fue sustituido habla bien de él y de su ambición, ya que –según argumentó– muy pocos tienen ese carácter.
“Fue muy fácil ver la furia de Jhon Durán y criticar su inmadurez, pero demuestra una mentalidad que lo distingue del resto”, aseguró a modo de introducción.
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Y justificó: “No hay muchos jóvenes que reaccionen con tanta rabia tras haber marcado en 2 partidos consecutivos de Champions. Durán está decidido a demostrar su valía y dejar su huella en cada partido”.
Por último, indicó que el colombiano va en camino de ser un astro: “Durán tiene todo el talento del mundo, algún día puede convertirse en uno de los mejores delanteros del fútbol y no quiere esperar 5 años para que llegue ese día”.
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Eso sí, aclaró que el español Unai Emery, su entrenador, tiene una labor de formación que todavía es importante: “canalizar” su ímpetu y forma de pensar.