El doblete del nigeriano Victor Osimhem asentó al Galatasaray en la parte alta de la tabla de la Liga Europa con un triunfo en el Rams Park de Estambul (3-2) contra Tottenham, que, con un jugador menos la última media hora, perdió sus primeros puntos en el torneo continental.
Allí, Dávinson Sánchez fue pieza clave. Además de haber sido titular, se lució en la zona defensiva, siendo prenda de garantía con cierres, ganando en el mano a mano y dando indicaciones constantes a sus compañeros de zaga.
Hasta su salida a Turquía, el conjunto londinense contaba sus partidos por victorias. Ganó a Qarabag, Ferencvaros y AZ Alkmaar, asentado en la cima. Pero el representante otomano le frenó en seco y la expulsión por doble amarilla de Will Lankshear complicó su situación a pesar de que, a base de empuje, logró acortar distancias y afrontar el tramo final con posibilidades de evitar su primera derrota.
Pero el Galatasaray, invicto, que añadió el triunfo ante el Tottenham a los logrados contra el PAOK y el Elfsborg y el empate ante el Riga, tomó ventaja a los seis minutos con un golazo de Yunus Akgun, que cogió un rechace al borde del área londinense y ejecutó un tiro que se coló por la escuadra derecha de la meta de Fraser Forster.
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El Tottenham se rehízo y pasado el cuarto de hora empató por medio de Will Lankshear a pase de Brennan Johnson, pero en el minuto 31 apareció Osimhen.
El nigeriano marcó la diferencia. Perdió el balón en su campo Radu Dragusin en un duelo con el argentino Mauro Icardi y llegó al belga Dries Mertens, que encontró a Osimhen. Encaró el africano, que batió a Forster por segunda vez.
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Ocho minutos después llegó el tercero del conjunto de Okan Buruk. En un centro preciso de Mertens otra vez. Una pelota aérea al área que cabeceó Osimhen para firmar el tercero.
La segunda amarilla que vio Lankshear dejó al Tottenham con diez. Aun así no se dio por vencido y en un centro, desde la derecha del español Pedro Porro, Dominic Solanke, de espuela, batió al uruguayo Fernando Muslera.