Aston Villa puso punto final a un duro presente. La última vez que había ganado fue el pasado 22 de octubre, cuando venció 2-0 a Bolonia, en Champions League . A partir de ahí, completó un total de ocho compromisos sin celebrar, entre Premier League, Liga de Campeones y Carabao Cup. Finalmente, este miércoles 4 de diciembre, venció 3-1 a Brentford, con Jhon Jáder Durán en la cancha.
Los últimos encuentros de los villanos habían sido 1-1 con Bournemouth, 1-2 frente a Crystal Palace, 1-4 contra Tottenham Hotspur, 0-1 con Brujas, 0-2 frente a Liverpool, 2-2 contra Crystal Palace, 0-0 con Juventus y 0-3 frente a Chelsea. Por eso, las críticas no se hicieron esperar hacia el director técnico, Unai Emery, y sus dirigidos. Y es que el panorama no era el mejor y había varias dudas.
Entendiendo la situación, salieron con otra postura en el Villa Park, y al Aston Villa le bastó el primer tiempo para liquidar las cosas. A los 21 minutos, Morgan Rogers abrió el marcador, tras un pase de Ollie Watkins; posteriormente, al 28', el propio Watkins demostró que no solo los pone, sino que también los hace, confirmando por qué es el goleador, siempre aportando en los partidos.
Y faltaba la cereza del pastel, por intermedio de Matty Cash, quien, al 35', infló las redes para el 3-0 parcial. Todo era alegría y tranquilidad en el conjunto 'villano', entre cuerpo técnico, jugadores e hinchas. Sin embargo, hubo un pequeño llamado de atención, ya que, recién arrancaba la parte complementaria, Mikkel Damsgaard descontó, pero no fue suficiente: culminaron 3-1 al final.
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Ahora, Jhon Jáder Durán entró al minuto 65 por Ollie Watkins y se mostró activo desde el inicio. No obstante, por momentos, se pasó de revoluciones. Prueba de ello fue que recibió una amarilla y lo condicionó para lo que restaba del compromiso. Eso sí, no fue expulsado, terminó el juego y siguió sumando minutos importantes con la camiseta del cuadro inglés, donde ha sido pieza clave.
Con esta victoria, los hombres de Unai Emery llegaron a 22 puntos, tras seis victorias, cuatro empates y cuatro derrotas, ubicándose en el séptimo puesto de la tabla de posiciones de la Premier League. Además, su diferencia de gol es de -1, luego de marcar 22 goles y recibir 23. Razón por la que vuelve a encaminarse en la lucha por entrar a los lugares de torneos europeos.
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