Juan Sebastián Molano y su gesto de frustración, tras escapársele la victoria en la Vuelta a España
La etapa 4 de la Vuelta a España tuvo como protagonista al colombiano Juan Sebastián Molano, quien luchó por el triunfo, pero al final fue superado por Kaden Groves.
Las emociones de este martes arrancaron con una fuga tempranera conformar por tres ciclistas: Eduardo Sepúlveda (Lotto Dstny), Ander Okamika (Burgos-BH) y David González (Caja Rural-Seguros RGA).
Ese pequeño grupo de escapados unió fuerzas para intentar ir por la victoria. Se hicieron los respectivos relevos entre ellos y llegaron a estar con ventaja de poco más de dos minutos sobre el lote principal.
Sepúlveda se quedó con los puntos en el Alto de Belltall y Coll de Lilla, convirtiéndose en el nuevo líder de la clasificación de la montaña. Más adelante, Okamika pasó primero en el esprint intermedio. Casi que al instante, esos 'tres mosqueteros' fueron absorbidos por el pelotón.
Juan Sebastián Molano en el esprint final.
PAU BARRENA/AFP
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La etapa que hasta ese momento era tranquila, se vio un poco alterada por una caída de varios ciclistas, entre los cuales el más afectado fue Santiago Buitrago.
Las escuadras se apuntaron para luchar por el esprint y Juan Sebastián Molano lanzó un ataque en los últimos metros. El nacido en Paipa dio la impresión de que ganaría, sin embargo, Kaden Groves lo rebasó a menos de 10 metros de la meta.
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Molano se tuvo que conformar con la segunda plaza, pero quería más, y, prueba de ello, fue el gesto que hizo con su brazo sobre la bicicleta. Pese a la molestia, se mostró tranquilo en sus declaraciones. "Hay que tener paciencia. El esprint es muy loco, no se imaginan uno cómo arriesga la vida, pero esto es lo que nos gusta, es ciclismo", manifestó el del UAE.