El australiano Kaden Groves se impuso en la cuarta etapa de la Vuelta a España, de 184,6 kilómetros, este martes en Tarragona, por delante del colombiano Juan Sebastián Molano.
Groves (Alpecin-Deceuninck) fue el más fuerte en la volata final, y se hizo con su segunda victoria en la ronda española, después de su triunfo en 2022.
El velocista de 24 años firmó su tercera victoria en una gran vuelta por etapas, después de haber levantado los brazos también en Salerno en el pasado Giro de Italia.
Molano había lanzado el esprint desde muy lejos, pero se le hizo demasiado larga la recta final.
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"Ha sido un buen año, con una victoria de etapa en el Giro y ganando en la Vuelta tan pronto, espero que no sea la última" victoria de etapa, declaró el australiano.
El belga Remco Evenepoel, ganador la víspera de la etapa en Andorra, conserva el maillot rojo de líder al término de una jornada tranquila para el pelotón, a pesar de un par de caídas producidas en la parte final del recorrido, en las que se vieron involucrados hombres como el esprínter francés Bryan Coquard y el líder del Bahrain-Victorious, el colombiano Santiago Buitrago.
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Evenepoel cuenta con cinco segundos de ventaja sobre Enric Mas, y once sobre el francés Lenny Martinez. El segundo corredor español en la general es Juan Ayuso, a 38 segundos. El ganador del último Tour de Francia, el danés Jonas Vingegaard, es cuarto a 31 segundos.
Un líder de la montaña argentino
El neerlandés Wilco Kelderman, noveno en la general antes de la etapa y uno de los hombres fuertes del Jumbo, también perdió tiempo, llegando a meta a más de tres minutos y medio de Groves.
El argentino Eduardo Sepúlveda (Lotto-Dstiny), ya escapado la víspera antes de ser alcanzado por el grupo de favoritos, sumó este martes seis nuevos puntos para ponerse líder de la clasificación de la montaña.
El argentino se fugó con los españoles Ander Okamika (Burgos-BH) y David González (Caja Rural-Seguros RGA).
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Aunque ya lucía el maillot a puntos azules -Evenepoel vestía el rojo de líder de la general- Sepúlveda se convierte después de esta cuarta etapa en el primer argentino en ponerse al frente de una clasificación en una gran vuelta.
Fuera de lo puramente deportivo, la policía española informó este martes de la detención de cuatro personas que intentaron sabotear la Vuelta a España vertiendo aceite en una carretera por donde pasaron los ciclistas el lunes.
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El miércoles se disputará la quinta etapa, entre Morella y Burriana, en la Comunidad Valenciana, con 186,2 kilómetros de recorrido y una única dificultad montañosa, el Collado de la Ibola, de segunda categoría, a más de 50 kilómetros para meta.