Miguel Ángel "Supermán" López y Rigoberto Urán lideran la armada colombiana en el Tour de Francia, con Nairo Quintana, Sergio Higuita, Esteban Cháves y Sergio Henao en la retaguardia.
Dos años después de que Egan Bernal firmara la primera victoria colombiana en el Tour, el ciclista del Ineos, que el año pasado no pudo defender su título, no está entre los que mañana tomarán la salida en Brest, tras haber ganado el Giro.
Huérfanos de él, los colombianos buscarán mejorar la actuación del año pasado, que se cerró con el sexto puesto de López en la general y dos victorias de etapa, la de "Supermán" y la firmada por Daniel Martínez en Puy Mary, aunque el de Bogotá no acude a esta edición.
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Por galones, Urán aparece como la principal baza colombiana en una carrera en la que ya sabe lo que es subir al podio y donde su nombre siempre suena entre los favoritos.
Su veteranía, tiene 34 años, juega a su favor y esta temporada llega con el respaldo de haber sido segundo en la pasada Vuelta a Suiza donde, además, se alzó con la victoria en la contrarreloj, una disciplina que en esta edición del Tour tendrá una enorme importancia.
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"Mi objetivo es subir al podio y ganar alguna etapa (...) Hay que ir a la ofensiva. Ineos lo puede hacer bien, no harán lo del año pasado, dejarlo todo al final. Desde el primer día puede haber sorpresas, puede haber más ataques en este Tour, será difícil que un equipo controle todo", asegura el ciclista del EF.
Su segundo puesto en 2017 le confieren el liderazgo de la formación estadounidense, una de las más potentes del pelotón, en la que cuenta con el respaldo de su compatriota Higuita, de 23 años, que viene con la espina clavada del año pasado, cuando una caída le obligó a abandonar cuando estaba en el puesto 16 de la general.
El campeón de Colombia del año pasado puede ser, además, una baza para el equipo en el caso de que Urán no responda a las espectativas.
"Es mi segunda participación y quiero seguir aprendiendo al lado de Rigo. Siempre que él esté bien situado en carrera, si surge una oportunidad y la puedo aprovechar sería muy bueno, pero lo primero es proteger al líder", afirma.
LA AMBICIÓN DE SUPERMÁN
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La general también es el gran objetivo de Miguel Ángel López, que a sus 27 años afronta por segunda vez el Tour, tras haber sido sexto en la pasada edición en su debut, en la que fue uno de los animadores de la edición y se apuntó en el col de la Loze la etapa reina.
El colombiano afronta este nuevo asalto con nuevos colores, los del Movistar español, donde compartirá galones con Enric Mas. La carretera marcará la jerarquía.
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"Supermán" tiene una pequeña ventaja, como ponen de manifiesto sus dos podios en grandes carreras, fue tercero en la Vuelta y el Giro de 2018, pero le falta licenciarse en el Tour.
Llega con pocos kilómetros en las piernas, un triunfo en la Vuelta a Andalucía y la victoria en el Desafío Mont Ventoux, una cima que será protagonista en la etapa 11 de la ronda gala.
"Creo que puedo estar con los mejores, cerquita a lo más alto del podio. Ya lo hice en la Vuelta y el Giro y no es por casualidad. El año pasado en mi primer Tour estuve cerquita, y eso da la confianza", asegura el de Pesca, que tras seis años en Astana afronta el desafío con nuevos colores.
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Su punto débil será la contrarreloj, que ha trabajado a conciencia y que en esta edición tendrá dos citas esenciales.
Nairo Quintana se ha obstinado en moderar las expectativas en este nuevo asalto al Tour, el octavo de su carrera, a los 31 años, un reto que afronta sin pelear por la general, pero con la ambición de ganar etapas.
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El de Boyacá arrastra todavía las secuelas de las caídas que el año pasado le alejaron de la pelea con los mejores, pero sus dos podios en París, segundo en 2013 y 2015, y sus tres triunfos de etapa, le confieren un gran pedigrí.
"No estoy en condiciones de disputar la general en el Tour de Francia", dijo el ganador del Giro de 2014 y la Vuelta de 2016, que ha preparado el Tour para ganar parciales.
QUINTANA DEJARÁ MINUTOS
Para ello, confesó, dejará escapar minutos lo antes posible, para que los gallitos del pelotón le permitan meterse en fugas y disputar etapas.
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La crono marcará también los objetivos de Esteban Chaves, que a sus 31 años afronta su tercer Tour tras el 23 puesto del año pasado y que comparte jefatura de filas del equipo BikeEchange con el australiano Lucas Hamilton, más avezado en la lucha contra el reloj.
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"Con 55 kilos compito con rivales 10 centímetros más altos", aseguró el escalador, ganador del Tour del Porvenir en 2011, que también tiene en su equipo al británico Simon Yates, tercero del pasado Giro.
Si la carretera se pone de su lado, el segundo de la Vuelta de 2016 y tercero del Giro de ese mismo año puede tener responsabilidades en una carrera que será un poco más difícil este año para los escaladores.
Henao ha ganado peso en el Qhubeka tras la retirada del italiano Fabio Aru, pero aunque llevará el dorsal más bajo de su equipo no parece que venga a luchar por la general en una formación que buscará más las victorias de etapa.
"Me siento muy motivado con este proyecto y esperamos darle una alegría al país. Colombia siempre es protagonista en este tipo de carreras y especialmente en el Tour", afirma.