El 'Rigo de la gente' llegó a Madrid: una multitud despidió a Rigoberto Urán en la Vuelta a España

Este domingo concluyó la edición 77 de la Vuelta a España, la cual dejó dos grandes gestas por parte de ciclistas colombianos. Sebastián Molano protagonizó una de ellas en la última etapa, con un memorable triunfo en Madrid. Rigoberto Urán se encargó de darle la primera alegría a nuestro país en la ronda ibérica, con un triunfo histórico en el Monasterio de Tentudía.El pasado 7 de septiembre 'Rigo' pudo 'sacarse la espina' en su sexta participación en La Vuelta. El 'Toro de Urrao' desplegó una exhibición en la decimoséptima etapa, la cual recorrió 162.3 kilómetros, con inicio en Arancenas.El pedalista antioqueño usó todo su conocimiento y experiencia en el último kilómetro, para vencer a Quentin Pacher (Groupama - FDJ) y a Jesús Herrada (Cofidis).Urán detuvo el cronómetro a las 3:42:28 para reclamar su primer triunfo en La Vuelta, la última que le hacia falta en las tres grandes, pues ya había levantado los brazos en el Tour de Francia y en el Giro de Italia.El medallista olímpico se convirtió en el ciclista número 104 en lograr victorias en las tres grandes del ciclismo y en el cuarto colombiano en conseguir dicha gesta. Urán se unió al selecto grupo que ya integraban Nairo Quintana, 'Lucho' Herrera y Oliveiro Cárdenas.Desde esa inolvidable jornada, Urán no paró de sonreír pues había cumplido su anhelado objetivo. Además, ese logro le permitió instalarse en la novena posición, la cual defendió hasta Madrid.Fue en esta ciudad, donde 'Rigo' por fin pudo celebrar con sus fanáticos. Este domingo, el pedalista nacional subió un video a sus redes sociales desde el bus del EF Education-EasyPost donde se puede ver una multitud coreando su nombre, ondeando banderas colombianas y disfrutando de la proeza que su ídolo había logrado. "Vea pues el cariño de la gente de Madrid, póngale pues cuidado. Ahí tenemos a todos nuestros fans, muchas gracias muchachos por ese cariño tan lindo que nos dan", fueron las palabras de 'Rigo', que no podía de la emoción.