El Barcelona y el Pozo Murcia jugaron la final de la Copa de España de futsal, en la cual se impusieron los 'blaugranas' por 7-6 en la tanda de penales, tras igualar 3-3 en el tiempo reglamentario.
La definición tuvo bastante polémica, debido a que a el Pozo se le fue anulado un penal que atajo su arquero-debido a que se adelantó- y que les daba el título de la competición. Esta acción desencadenó la furia de Taynan Da Silva, jugador brasileño del equipo 'charcutero', que se vio ganador por unos instantes.
El futbolista le propinó un cabezazo a uno de los árbitros, insultó al grupo de colegiados y volvió al campo sin autorización, luego de ser expulsado. Esta acción terminó dándole una sanción de 15 partidos sin poder jugar con su club.