El estadounidense Brooks Koepka consiguió un eagle en el penúltimo hoyo (17) para ganar este domingo el Abierto de golf de Phoenix, seis años después de haber logrado su primer título en el circuito de la PGA.
Después de un año 2020 nefasto por lesiones en una cadera y una rodilla, Brooks Koepka, de 30 años y ex número uno del mundo, ha vuelto a encontrar una sonrisa en Arizona, para el deleite de los 5.000 espectadores que pudieron asistir al torneo -limitado por el COVID-19 -, ciertamente muy lejos de los 700.000 que solían acudir de jueves a domingo en otros años.
En una cuarta y última ronda en la que logró dos eagles, el del hoyo tres fue para borrar un error cometido en el hoyo previo, Brooks Koepka subió tranquilo pero seguro al grupo de los seis primeros, que incluían a sus compatriotas Jordan Spieth y Xander Schauffele, líderes tras la jornada del sábado.
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El cuatro veces ganador de torneos de Grand Slam (US Open 2017 y 2018, Campeonato de la PGA de 2018 y 2019) señaló que "he pasado muy bien toda la semana y esperaba que hoy llegara mi turno. Fui paciente y fui recompensado".
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"Los últimos meses he pasado por algunos momentos oscuros mentalmente después de fallos físicos, preguntándome si volvería a ser el mismo golfista", agregó el ganador.
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Destacaron en cuarto lugar el veterano Steve Stricker, junto al mexicano Carlos Ortiz y Jordan Spieth. Los tres terminaron con 267 impactos (-17).
Entre los favoritos, el español Jon Rahm y el estadounidense Justin Thomas, segundo y tercero del escalafón mundial, respectivamente, concluyeron empatados en el decimotercer puesto con un total de 271 golpes (-13).
El argentino Emiliano Grillo terminó en el 22º puesto con otros siete jugadores, todos con 273 (-11), mientras que los colombianos Camilo Villegas y Sebastián Muñoz no pasaron el corte de la segunda jornada.