Un partido en el que hubo goles marcados, otros anulados, el discutido uso del VAR, una dura y criticada patada de Koulibaly a Lionel Messi y que dejó un triunfo 3-1 de Barcelona sobre Nápoles: ese fue el resumen de 90 minutos, en los que los catalanes avanzaron en la Champions y dejaron en el camino a los napolitanos.
El duelo de ida había terminado con un marcador de 1-1.
Tras una temporada complicada, el Barça consigue meterse en la 'Final 8' de Lisboa en busca de una Champions, que le permita salvar la campaña después de perder la Liga a manos del Real Madrid.
Durante el encuentro europeo, de este sábado, jugó el arquero colombiano David Ospina, quien no estuvo comprometido en los goles de Lenglet, Messi y Luis Suárez. El descuento de los italianos llegó por intermedio de Lorenzo Insigne.
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El VAR fue usado en contadas oportunidades, como en el primer tiempo cuando se le anuló un tanto a la 'Pulga' Messi o en la decisión final de la anotación que abrió el marcador para los de Quique Setién.
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Con el paso de los minutos, el Barça consiguió controlar más el juego, pero en el último cuarto de hora, el Nápoles se jugó el todo por el todo, lanzándose hacia adelante, pero sin poder volver a mover el marcador.
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Ahora, Barcelona se deberá ver las caras en los cuartos de final con Bayern Múnich, que no tuvo problema para eliminar a un débil Chelsea.