La petrolera saudí Aramco seguirá siendo patrocinadora, ahora principal, de la escudería Aston Martin, la del doble campeón de Fórmula 1 español Fernando Alonso, hasta 2028, según la extensión del contrato que unía a ambas partes y que ha sido anunciado este jueves.
Alonso, de 42 años, causó sensación al acabar cuarto el pasado Mundial, en el que subió ocho veces al podio en su primera temporada con la escudería de Silverstone, en la que forma pareja con el piloto canadiense Lance Stroll, el hijo del dueño del equipo, Lawrence Stroll.
A partir del próximo 1 de enero, el equipo pasará a denominarse Aston Martin Aramco Formula One Team durante los próximos cinco años, según anunció la escudería este jueves a través de un comunicado.
"Estamos muy orgullosos de extender y fortalecer nuestra exitosa relación con Aramco", explicó Lawrence Stroll en el citado comunicado. "Ya disfrutamos de una importante relación estratégica y su apoyo como nuestro socio principal durante los próximos cinco años es una clara demostración de nuestra compartida ambición", añadió el directivo canadiense.
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"Desde 2022, ellos han jugado un papel primordial en el camino en la Fórmula 1 de la escudería Aston Martin; y su contribución sólo va a ser más significante en los años venideros", afirmó.
"Estamos trabajando juntos en distintas iniciativas puntuales, incluido el desarrollo de combustibles avanzados para 2026, cuando empiece nuestro vínculo, en lo que a las unidades de potencia se refiere, con Honda. La experiencia y los productos de Aramco supondrán una contribución real a nuestro rendimiento en pista y añadirán un valor significativo en muchas otras áreas de nuestra organización", explicó Lawrence Stroll en relación con el acuerdo de patrocinio principal del equipo hecho púbico este jueves.
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Alonso, la gran figura del equipo, sumó ocho podios -tres segundos y cinco terceros puestos- la pasada temporada, en la que sumó 206 puntos y acabó cuarto un Mundialque ganó de forma holgada el neerlandés Max Verstappen (Red Bull) y que su compañero Stroll finalizó décimo, con 74.
La escudería de Silverstone, cuyo jefe de equipo es el luxemburgués Mike Krack, concluyó en quinta posición el Mundial de constructores -título que revalidó la dominante Red Bull-, cuatro puestos mejor que la penúltima temporada de la Fórmula 1.