Cumpliendo el guión previsto, el sueco Armand Duplantis revalidó sin problemas su título de campeón del mundo del salto con garrocha, este sábado en Budapest, aunque sin poder batir una vez más su propio récord del mundo.
'Mondo' tuvo como mejor altura sobrepasada la barra de 6,10 metros, que le permitió superar en el podio al filipino Ernest John Obiena (plata con 6,00 m) y al australiano Kurtis Marschall (bronce con 5,95 m).
Con el oro asegurado, Duplantis trató de mejorar su propia plusmarca mundial [6,22 metros, logrados en febrero en Clermont-Ferrand, Francia], pero derribó por tres ocasiones la barra de 6,23 metros, para desilusión del público húngaro, que vibró con cada uno de sus intentos.
El año pasado, Duplantis (23 años) sí consiguió colgarse el oro con un récord del mundo, entonces con 6,21 metros, en Eugene (Estados Unidos).
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Duplantis tuvo un concurso tranquilo, superando a la primera las barras de 5,55, 5,85, 5,95, 6,00, 6,05 y 6,10 metros, con total seguridad y sin temblar.
A esa altura tenía ya el título asegurado. El filipino Obiena, que con sus 6,00 metros batió el récord asiático, agotó su número de intentos.
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Duplantis atacó entonces el récord mundial ante los 6,23 metros. Hubo especialmente tensión en su tercer y último vuelo, pero tocó la barra, que tras un instante suspendida terminó cayendo.
En cualquier caso, la estrella de la disciplina sumó su tercera medalla mundial, después de la plata de Doha en 2019 y el oro de Eugene en 2022.
A ello añade el oro olímpico de 2021, el oro mundial en pista cubierta de 2022 y los oros europeos de 2018 y 2022, entre otros éxitos en un palmarés impresionante.
"Estoy feliz por estos oros seguidos que he logrado. Me alegra seguir ganando. Teníamos hoy un ambiente de locura. Siento algo de presión al ser el defensor del título, pero es estupendo ser de nuevo campeón", celebró Duplantis.
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En Mundiales, Duplantis encadena un segundo oro consecutivo en el salto con garrocha, como hizo su predecesor en el palmarés, el estadounidense Sam Kendricks, coronado en 2017 y 2019.
Junto a ellos, el único que ha logrado revalidar su corona en esta prueba masculina en un Mundial ha sido el mítico Sergey Bubka, que encadenó los seis primeros oros de la historia del evento, entre 1983 y 1997, los tres primeros como atleta soviético y los tres últimos ya como ucraniano.
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