Los sentidos de los animales son mucho más agudos que los del ser humano, por esta razón, el ruido que generan las explosiones de la pólvora pueden producir respuestas de miedo en las mascotas. El ritmo cardíaco se ve afectado por el pánico y el estrés, causando incluso la muerte de algunos animales.
El médico veterinario y etólogo, Felipe Valencia, habló con Noticias Caracol sobre el tema e insistió en el reconocimiento del lenguaje corporal del animal.
“Un perro con una respuesta de miedo puede tener un aumento en su respuesta cardíaca, un aumento en su salivación y puede tener las pupilas dilatadas y temblores generalizados”, dijo el veterinario.
Con respecto al comportamiento de los perros, Valencia comentó: “ El lenguaje corporal del perro ante las situaciones de miedo es típico, el cuerpo agazapado, la cola agachada y entre las patas”.
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La fauna silvestre
Victoria Rodríguez, directora de la Asociación de Veterinarios Vida Silvestre, habló sobre estudios del tema: "lamentablemente aquí en Colombia son muy poquitos, hay uno muy importante de la Universidad Nacional de Medellín sobre el material particulado después de la alborada, demuestra que se incrementa más de un 100 por ciento esa cantidad de material tóxico”.
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Con respecto a la fauna silvestre, Rodriguez describió los reportes que se dan tras los eventos de explosión de pólvora: “es importante el incremento de nidos o polluelos abandonados que le llevan a uno a los centros de atención y valoración de animales silvestres”.
La explicación radica en las respuestas de miedo de los animales ante las explosiones y la reacción primaria de huir.
El smog, las luces y el ruido aturden a las aves, por ello vuelan más alto y más lejos de lo normal, se desorientan y pueden perder total o parcialmente su audición generando incluso la imposibilidad de comunicarse con sus pares y no pueden volver a su hábitat.
Secuestro emocional
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En los mamíferos, cuando “el cerebro entra en estado de emergencia, la corteza cerebral, que es la parte consciente, se bloquea y la respuesta queda a merced del sistema límbico que es el sistema emocional”, explicó el médico Felipe Valencia.
Lo mismo pasa con las aves que huyen, pues el instinto de supervivencia y la adrenalina los logra desorientar y sentirse abandonados.
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También se debe tener en cuenta que las quemaduras y la muerte ocasionada por pólvora en animales silvestres se presenta cuando el evento pirotécnico es cercano, según la directora de la Asociación Vida Silvestre.
Las muertes secundarias se relacionan con la respuesta de supervivencia, pues durante la huida el animal está totalmente aturdido.
Valencia explicó, además, que los perros que tienen respuestas de miedo o fóbicas podrían morir tras una frecuencia cardíaca demasiado elevada o padecer politraumatismos. También resaltó que pueden ocasionarse accidentes viales cuando los animales huyen, pues ellos lo hacen en un estado de inconsciencia.
Sugirió que, en episodios de ruidos, lo mejor es encerrar al perro en una habitación donde pueda tener agua y juguetes para evitar un secuestro emocional. Es vital dejar al animal solo por un tiempo ya que podría tener una respuesta negativa contra su amo u otras personas.
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Por esto, es preciso hacer un llamado de ayuda a aquellos animales sin hogar y a la fauna silvestre y a evitar el uso de la pólvora por seguridad de humanos y especies indefensas, pues es diversión para algunos puede terminar en tragedia para otros.