¿Por qué alguien no le resulta agradable a los gatos? Conozca las razones

Varias personas han manifestado su inquietud sobre la manera en que los gatos expresan cariño, a diferencia de los perros, que tienden a ser más expresivos. En consecuencia, algunas personas han malinterpretado ciertos comportamientos, confundiendo la forma en que actúan.

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Según expertos en conducta felina, al igual que con los humanos, los gatos tienden a mostrar preferencias al relacionarse con los demás y pueden experimentar sentimientos negativos ante ciertos comportamientos. De este modo, no todas las personas pueden ser de su agrado.

La etóloga y médica veterinaria, Carolina Alaguna, indica que los gatos suelen llevarse mejor con las mujeres, ya que tienen un tono de voz suave y son más delicadas. Los felinos, al ser animales sensibles, pueden sentirse asustados por hombres que les hablen demasiado duro. Además, prefieren personalidades tranquilas y calmadas, por lo que las personas activas y enérgicas pueden resultarles intimidantes.

¿Cuáles son las personas que no le agradan a los gatos?

Según John Bradshaw, experto en comportamiento felino y autor de ‘En la mente de un gato’, esta conducta se relaciona con el contacto inicial o temporal entre el felino y una persona específica. Factores como el género, la edad y las experiencias pasadas también ejercen influencia.

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Las personas que no suelen agradar a los gatos son:

1. Personas agresivas: los felinos no responden bien a la violencia, el miedo puede hacer que se sientan inseguros y estresados. Corregir a los gatos con conductas agresivas solo consigue generar miedo y rechazo profundo. Es preferible buscar otras maneras de educarlos y solicitar la ayuda de un experto como un veterinario, etólogo o entrenador.
2. Personas ruidosas: los oídos de los gatos son más desarrollados, sensibles y potentes que los de los humanos. Ruidos fuertes como rayos, estruendos, pólvora, gritos o música a todo volumen no solo les desagradan, sino que también generan miedo, estrés y ansiedad. Las personas que gritan mucho o escuchan música a altos niveles no suelen agradarles a estos animales.
3. Personas que los ignoran: contrario a lo que se suele pensar, los gatos odian sentirse ignorados. Aunque son generalmente independientes, necesitan cuidados, atención y amor. Las personas apáticas, indiferentes e insensibles no suelen ser del agrado de los gatos.
4. Personas excesivamente cariñosas: para los gatos, todos los excesos son malos. No les gusta sentirse ignorados, pero tampoco disfrutan sentirse hostigados o perseguidos. A pesar de despertar ternura como animales de compañía, muchos gatos no aprecian ser abrazados constantemente o recibir demasiados besos. El contacto físico no es percibido de la misma manera por los gatos que por los humanos.
5. Personas con olores intensos: los gatos tienen un agudo sentido del olfato. Las personas que usan perfumes fuertes o tienen olores corporales intensos pueden resultar molestas para ellos. Los gatos prefieren olores suaves y naturales, y una fragancia intensa puede ser abrumadora para ellos.

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