La inteligencia artificial es un tema de discusión en el foro económico mundial que se lleva a cabo en Davos, Suiza. Allí, el Fondo Monetario Internacional advirtió sobre el riesgo de algunos empleos por cuenta de esta tecnología.
Rafael Méndez, decano de la escuela de ingeniería, ciencia y tecnología de la Universidad del Rosario, se refirió a lo expuesto en el foro económico.
“Hay dos perspectivas sobre esta noticia del Fondo Monetario Internacional: por un lado, hay una posición muy crítica y que podría considerarse en algunos casos exagerada, ya que la opción de la inteligencia artificial también podría generar nuevos empleos. Lo que sucede con todo lo que viene de las revoluciones industriales es que con ellas llegan transformaciones del trabajo de manera profunda. En el caso de la inteligencia artificial, sin duda alguna, ciertas tareas repetitivas o las que corresponden con grandes cantidades de información, podrían estar enfocadas en el uso de las tecnologías emergentes”, aseguró.
Según el informe del Fondo Monetario Internacional, la inteligencia artificial podría afectar el 40% de los empleos.
“La inteligencia artificial viene a impulsar una transformación de la fuerza laboral. Tareas repetitivas, por ejemplo, en la educación, podrían estar impactadas positivamente por el uso de este tipo de tecnologías emergentes. En otro tipo de industrias, por ejemplo, la manufactura, la comunicación, conducción, podría tener un impacto también muy positivo y se podrían generar nuevas tareas y reoxigenar la fuerza de trabajo. Decir que va a reemplazar completamente al humano, pues es un poco exagerado”, aseveró.
Méndez también habló de cómo la inteligencia artificial puede impactar positivamente algunas profesiones: “Hace años, cuando se creó la calculadora, en Estados Unidos los maestros salieron a manifestarse porque pensaron que la matemática se iba a acabar. No fue así, lo que sucedió fue una transformación. Otra cuestión tiene que ver con la incorporación de este tipo de tecnologías en, por ejemplo, carreras de enfoque tradicional, hablemos de las humanidades digitales, la inteligencia artificial al servicio de las ciencias de la salud, de la inteligencia artificial al servicio de los mercados. Viene muy bien incorporar este tipo de nuevas tendencias para reestructurar los portafolios académicos”.