En las últimas horas, Shakira dio algunas declaraciones sobre lasinfidelidades por parte de Gerard Piqué,
expareja y padre de sus dos hijos: Milan y Sasha, y acerca de la salud de su padre. Además, contó cómo la música fue su salvavidas en tiempos difíciles.
Durante una entrevista para la revista People en español, la intérprete de ‘Monotonía’ sacó varias verdades a la luz. Mencionó que su padre, William Mebarak, voló hasta Barcelona cuando “estaba consumida de tristeza” por su separación con el exfutbolista. Estando allí, resultó gravemente herido en un accidente mientras estaba en la primera comunión de Milan, el hijo mayor de la expareja.
Esto sucedió a mediados de 2022, cuando después de 12 años juntos, Shakira anunció que se estaba separando de Piqué, mientras que su propio padre se enfrentaba a una grave crisis de salud tras caerse dentro de la casa. “Todo se me juntó, mi hogar se desmoronaba”, recordó la artista.
"Me enteraba por la prensa que había sido traicionada, mientras mi papá estaba en la UCI. Pensé que no sobreviviría a tanto", recordó. Shakira también habló de la música como refugio durante este proceso de desahogo y de renacer. Además de asegurar que Milan y Sasha fueron y son su mayor fortaleza, se refirió a lo que representa su papá en su vida, pues lo admira por su valentía y resiliencia.
"El hombre que más he querido en mi vida, mi padre, se me iba cuando más lo necesitaba, pero no podía hablar con él ni recibir los consejos de mi mejor amigo que tanto habría necesitado. Ha superado un COVID, dos accidentes, una neumonía, cinco cirugías, todo esto a sus 91 años en menos de seis meses. Mi papá es el más grande ejemplo de resiliencia, y mi madre a su lado día y noche acompañándolo", expresó.
Para Shakira, el matrimonio de sus padres ha sido “un reflejo de ese sueño" que no pudo cumplir, pero desea que sea un modelo para sus hijos "de amor, de paciencia en las relaciones, de entrega absoluta y de ganas de vivir”.
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La cantante colombiana espera que todo el dolor que sus hijos han enfrentado injustamente los convierta en seres humanos más compasivos. “Ellos para mí lo son todo, son la razón de mi vida. Me inyectan una fuerza cada día indescriptible y además me llenan el día a día de alegrías”, concluyó.
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