Ivan Beerkus y Angela Nikolau, dos aficionados al rooftopping o la escalada ilegal de edificios, se conocieron en 2016 de una manera muy poco convencional. Ivan invitó a Angela, una mujer en la comunidad de escaladores de tejados, a unirse a él en la escalada del Goldin Finance 117, el rascacielos sin terminar más alto de China, con una altura de 597 metros.
Aunque inicialmente su relación fue profesional, centrada en la creación de contenido patrocinado en redes sociales, este primer ascenso juntos marcó el comienzo de una larga y emocionante relación.
Ocho años después, la pareja ha viajado por el mundo, enfrentando desafíos cada vez más difíciles y documentando sus aventuras vertiginosas.
Skywalkers, un nuevo documental de Netflix, narra su historia de amor
El documental que repasa su historia muestra a Angela como una gimnasta que aporta a la relación su capacidad para realizar acrobacias en las condiciones más extremas, mientras que Ivan, que empezó a escalar solo en Moscú, busca en estas alturas una claridad mental que describe como un "estado mental ampliado", según informes de CNN.
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Uno de sus logros más impresionantes fue la escalada del Merdeka 118 en Kuala Lumpur, el segundo edificio más alto del mundo, que aún estaba en construcción en 2022.
La pareja planeó meticulosamente esta aventura, evadiendo la seguridad para alcanzar la cima de manera segura.
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A través de sus hazañas han aprendido a apoyarse mutuamente
Sin embargo, no todo ha sido fácil para ellos. Han tenido encuentros con la policía en varias ciudades, como París y Kuala Lumpur, donde sus actividades ilegales han llamado la atención de las autoridades.
A pesar de los riesgos, continúan persiguiendo su pasión y su amor por las alturas.
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