Fernando Botero
, uno de los exponentes del arte colombiano más importante a nivel internacional, creó un lenguaje único para expresar su visión del mundo. La pintura, una de las grandes voceras de ello, le sirvió especialmente para lidiar con todo aquello que lo acongojaba.
- Puede interesarle: Por muerte de Fernando Botero, Medellín decreta 7 días de luto
En el Museo de Antioquia reposan muchas de las obras magnas de Botero, e incluso tienen algunos espacios dedicados a su recorrido artístico.
Pese a que dejó de vivir en Medellín durante los años 50, nunca se desligó completamente de la ciudad y contribuía constantemente para continuar potenciando espacios culturales como el Museo, el cual comenzó a recibir sus donaciones en el año de 1975.
"La primera pintura que hizo parte de la exposición fue Exvoto; después, entregó un grupo de obras que reunió en la sala denominada Pedrito Botero (...) En la sala de esculturas, recibidas en 1984, se exhiben obras de menor escala en comparación con las piezas de estilo monumental que están ubicadas en la Plaza Botero, al exterior del Museo", relata la entidad.
En medio de todas sus creaciones, Fernando Botero admitió que su favorita, la más íntima, reposaba en dicho recinto.
Publicidad
Es una pintura nombrada ´Pedrito a caballo´, en honor a uno de sus hijos, quien a la corta edad de 4 años falleció trágicamente en Madrid.
Camilo Castaño, curador del Museo de Antioquia, relató paraNoticias Caracol que Botero perdió a Pedrito y uno de sus dedos durante el accidente de tránsito.
Publicidad
"Esta obra es la primera que hace luego de recuperarse de toda esa tragedia”, agregó el curador, comentando que una de las condiciones de la donación es que el recinto donde estuviera debía llevar el nombre de su hijo.
“Que esa obra esté en el Museo de Antioquia es muy significativo, incluso para él, y lo ha dicho en distintas entrevistas. Es su obra más importante”, indicó María del Rosario Escobar, directora del Museo de Antioquia.
Tras la muerte del maestro, Escobar comentó en Caracol Ahora que el legado de Fernando Botero era "múltiple y profundo, como lo es el arte".
"Que un muchacho de Medellín lo hubiera logrado significa mucho para muchos hombres y mujeres que también desde estas tierras tienen sueños", recalcó.
Publicidad
- En temas relacionados: Las obras más recordadas de Fernando Botero, famoso por sus ‘gordas’