Lady Tabares y Víctor Gaviria hablan de recuerdos inéditos de ‘el Zarco’ en ‘La Vendedora de Rosas’

A pesar de que hace más de dos décadas fue asesinado en Medellín Guiovanny Quiroz, quien interpretó al 'Zarco’, en la película ‘La Vendedora de Rosas’ de Víctor Gaviria, sus sueños y vivencias siguen plasmadas en quienes lo conocieron como el mismo cineasta y Lady Tabares.

“‘El Zarco’ era un pelado muy divertido, muy inteligente, bastante inteligente, pero bastante loco, travieso, con muchos complejos”, recordó Lady, en entrevista con el programa La Red del Canal Caracol.

Los cinco minutos de fama que lograron compartir le permitió conocer quién era ‘el Zarco’ y mantener viva su memoria hasta ahora, aunque sus sueños quedaron truncados.

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“No sé por qué a mí me parece que podía ser como una especie de Ramiro Meneses, en el sentido de que tenía mucho humor también como Ramiro” asegura Víctor Gaviria.

“Era una persona que de niño fue necio y también tenía sus sueños. De pequeño quiso ser actor o cantante”, señala Aníbal Quiroz, el hermano del 'Zarco’.

La vida del joven dio un giro que lo llevó hasta el Festival de Cannes, Francia, uno de los más importantes a nivel cinematográfico.

“’El Zarco’ tuvo muchas etapas para mí, al comienzo era el amigo que acompañaba a un delincuente, que siempre estaba detrás y me dijo: ‘Víctor póngame a mí a hacer ese papel que yo sé cómo es’”, dice el director antioqueño.

Pero su participación también significó muchos riesgos para la producción.

“Me tocaron varias experiencias con él, por decir en plena grabación estábamos en peligro de que lo mataran, también de ocasiones donde Víctor o alguno de producción tenía que ir hasta la estacione de Policía por él. Pero yo no conocí, que yo diga, yo vi un tipo más bien delincuente en ‘El Zarco’, no, yo vi un man digamos rescatable”, expresa Lady.

Para Víctor, ‘el Zarco’ “tenía muchas transformaciones en un día normal, se levantaba muchas veces como un ángel con sus ojos verdes relucientes, amable, pero también se iba drogando durante el día y por la noche era un monstruo, con el cual uno no podía ni hablar, pero un monstruo, entre comillas, no porque agrediera a los demás sino porque se agredía a sí mismo”.

Su hermano recuerda el día en que llegó diciendo que iba para Francia 98, “entonces uno no sabía si creerle o no creerle, sin embargo, estuvo en el Mundial y estuvo en el Festival de Cannes”.

“Si algo tenía ‘el Zarco’ era presencia, él podía ser el desatinado que fuera pero tenía una presencia que podía incluso salir con sus desfachateces y se veía bien con su esmoquin, pero despelucado como siempre, trabándose, pero me parece que se portó como debía ser. Él se la gozó a su manera”, manifiesta Tabares.

El hermano de Guiovanny recuerda que cuando estuvo en Cannes, se ganó una beca. Él quería seguir su sueño, pero de pronto no contó con el apoyo.

“Fueron tantas promesas que nos hicieron no solo al 'Zarco’ sino como a todos, y creo que todos quedamos como esperando”, dice Lady.

“Él volvió a lo mismo, que era a manejar la calle, a buscar otras oportunidades y a esperar la noticias de que si iba a seguir siendo actor”, expresa su hermano.

Al final, esa oportunidad no llegó y las balas le arrebataron la vida.

“Cuando se desdoblaba en su consumo de droga y demás le daba por robar y parece que había ido a robar a un barrio cerquita. Lo habían perdonado, lo dejaban pasar hasta que algún día se cansaron de él y en algunos de esos robos así malucos el hombre todo trabado y demás no lo perdonaron y le pegaron unos tiros”, detalla Gaviria.

Sin embargo, así como para su familia y quienes lo conocieron gracias a sus cinco minutos de fama no se ha ido.

“Para mí él no se ha muerto porque todavía hablan de él como que estuviera vivo”, señala subraya Aníbal.

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