Harvey Weinstein, productor de Hollywood, y James Dolan, presidente del Madison Square Garden y gobernador de los New York Knicks y los New York Rangers, fueron acusados de abuso sexual y trata de personas por parte de una masajista. Los hechos ocurrieron hace más de 10 años.
Weinstein, quien actualmente cumple en Estados Unidos con una condena de 23 años en cárcel por abuso sexual en Nueva York y tiene una condena pendiente de 16 años por violación en Los Ángeles, ahora también será investigado por las recientes acusaciones de Kellye Croft.
Kellye Croft narró en los documentos legales, revelados por CNN, que conoció primero a James Dolan en medio de su trabajo como masajista de la banda Eagles en una de sus giras.
Según la víctima, Dolan "la convocó múltiples veces en su habitación" pidiendo masajes y, en todos ellos, la forzaba a tener relaciones sexuales aunque ella no daba su consentimiento. La mujer señaló que el dueño de los Knicks es "extremadamente manipulador" y la hacía sentir obligada a tener esos encuentros con él.
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La situación inició en 2013 y siguió el año siguiente. Según la denuncia, durante ese tiempo James Dolan facilitó su transporte a través de las fronteras estatales "con fines de sexo inducido por la fuerza, el fraude o la coacción".
Harvey Weinstein, el polémico productor de Hollywood condenado por otras demandas similares, entra en escena en esta historia gracias a su amigo cercano James Dolan, quien le agendó un masaje con Kelley Croft.
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La masajista señaló que cuando llegó al lugar en el que la esperaba Harvey Weinstein, este le pidió que le diera el masaje desnuda, a lo que ella se negó. Entonces el productor recurrió a la fuerza y la agredió sexualmente, según relató la víctima.
"James Dolan me manipuló, me llevó a California para abusar de mí y me tendió una trampa para que Weinstein me agrediera", aseguró la mujer que en la actualidad tiene 38 años y afirmó que tardó en demandar temiendo el poder que ambos hombres tienen sobre la industria del entretenimiento y los medios de comunicación.
Por su parte, desde los equipos de defensa de ambos hombres se negaron estas acusaciones. En ambos casos los abogados señalan que pueden ir a juicio para probar que la mujer no tiene pruebas para demostrar su demanda.