En agosto de 2019, un cruel hallazgo en una casa conmocionó a la ciudad de Tunja, en el departamento de Boyacá. Fue encontrado el cuerpo sin vida de María del Tránsito Arias, vendedora ambulante de 49 años. El Rastro conoció la verdadera historia detrás del feminicidio.
La víctima era una mujer muy trabajadora, viuda y madre de tres hijos. La desaparición de Arias alertó de inmediato a su hijo menor, Omar, pues no era usual que su mamá no contestará las llamadas ni se comunicará, como era costumbre.
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Una de las hijas mayores se dirigió a la casa de su madre para verificar si estaba allí y al ingresar evidenció que la estufa estaba prendida. Luego, fue a su cuarto y encontró el cuerpo sin vida de su mamá.
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“Lo único que hago es mirar hacia la habitación de ella. La primera imagen fue verla encima de la cama semidesnuda. Yo me quede impactada, no sabía qué hacer...La encuentro de medio lado con la cara tapada. Lo que hago es subir a la cama, le quito la cobija, tenía un alambre amarrado, golpeada la nariz y con varias puñaladas en la cara”, afirmó su hija, Mari Vargas, quien de inmediato avisó a las autoridades.
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Para la Policía fue evidente que se había tratado de un homicidio, pero ¿quién quería causarle daño a esta mujer? Las primeras horas de investigación fueron claves para hacer los respectivos análisis y lograr testimonios para dar con el culpable del atroz crimen.
Los familiares de la víctima aseguraron que su madre sostuvo una relación amorosa con Juan Evangelista Vargas Pantoja, de 32 años y de nacionalidad venezolana. Desde el inicio de la relación, los hijos de Arias estaban escépticos sobre las intenciones del hombre con su mamá, sobre todo por la diferencia de edad.
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“Mi mamá se veía muy feliz, decía que lo quería mucho y que no nos metiéramos ni mis hermanos ni yo”, reveló Claudia Marcela Gómez, hija de la víctima.
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María del Tránsito Arias confesó en reiteradas ocasiones que el joven la maltrataba y la golpeaba, por lo que su hija Mari la convenció de que pusiera una denuncia en contra de Juan Vargas y pidió también una medida de protección.
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Meses después, la mujer le dio otra oportunidad a Juan Vargas. Tras el fallecimiento de Arias, las autoridades apuntaron como principal sospechoso a su pareja actual. Sin embargo, encontrar las evidencias suficientes que demostrarán su culpabilidad en el crimen se convirtió en un reto para los investigadores.
Las cámaras de seguridad demostraron que la víctima estaba esperando a Juan Vargas, a quien se le ve ingresar a la residencia. Además, el testimonio de la expareja de Vargas fue clave para perfilar a este hombre como una persona violenta.
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Condenado por feminicidio
Las autoridades de inmediato empezaron una búsqueda intensiva para dar con el paradero del presunto homicida, pero solo lograron dar con su paradero 4 meses después. Por medio de unas fotografías publicadas en sus redes sociales se logró localizar Vargas, en Armenia, Quindío.
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El 20 de noviembre de 2019, la Policía capturó a Vargas. Ese mismo día fue trasladado hasta Tunja, donde se realizó la audiencia de la legalización de la captura. En primera instancia, el hombre negó ser el autor del crimen, pero tras conocer las pruebas recolectadas por las autoridades, Juan Vargas admitió ser el autor material e intelectual del asesinato de María del Tránsito Arias.
Fue condenado a 35 años de prisión por los delitos feminicidio agravado y hurto calificado.
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