La madrugada del 30 de septiembre de 2023, una tragedia ocurrió en una humilde vivienda en el barrio Los Alpes, de la localidad de Ciudad Bolívar, en Bogotá. Olga Quiñones, de 42 años, y su hija Melany Sofía Gutiérrez, de 10 años, fueron víctimas allí cuando un incendio que consumió su hogar.
Los habitantes del sector lograron auxiliar a madre e hija gracias a que la pareja sentimental de Olga y padrastro de Melany logró salir de la vivienda y pedir ayuda. Con ayuda de los vecinos, rompieron una de las paredes de la casa y sacaron a las víctimas, fueron trasladas a hospitales cercanos con quemaduras de tercer grado en más del 70 % del cuerpo. Ambas fallecieron días después por la gravedad de las heridas.
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Las condiciones de la vivienda generaron múltiples hipótesis: un cortocircuito, un accidente casero o un incendio provocado. La Policía comenzó investigando posibles conexiones irregulares en la vivienda, pero pronto la verdad salió a la luz.
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El caso fue asignado a la patrullera Laura Barrera de la Policía Metropolitana de Bogotá. La mañana del 3 de octubre, la uniformada recibió un dato clave: el incendio fue provocado. "En el informe pericial que nos entregan los bomberos se determina que el incendio fue provocado", relató la patrullera.
La Unidad Investigativa del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá concluyó que un agente químico similar a la gasolina provocó el incendio. Es decir, que alguien había regado gasolina al interior de la casa en plena madrugada un combustible altamente inflamable. ¿Quién querría hacerle daño a esta mujer trabajadora y a su hija?
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La investigación revelaría el rostro del responsable de uno de los hechos más crueles que ocurrió en Bogotá durante el 2023.
Antes los ojos de todos los vecinos del barrio, Sandy era una persona ejemplar, pero en la intimidad del hogar era un hombre celoso. Las peleas no tardaron en convertirse en episodios violentos, además Olga era la encargada de todos los gastos del hogar.
La mujer había decidido terminar la relación sentimental. Días antes del incendio le pidió al hombre que se fuera del hogar, pero él le pidió quedarse un poco más.
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La investigación de las autoridades condujo a considerar un sospechoso: Sandy Madera Arroyo, pareja sentimental de Olga y padrastro de Sofia, quien, hasta hoy, niega ser el responsable de la muerte de las dos mujeres.
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Con una cámara de seguridad se permitió establecer la prueba que tanto buscaban las autoridades, donde se veía al hombre comprando el líquido con el que se quemó la casa. Gracias a la inspección de las fotos de la vivienda tras el incendio se pudo establecer que eran las mismas botellas que se veían en los videos.
La investigación reveló que Sandy Madera Arroyo, pareja sentimental de Olga y padrastro de Melany, era el responsable. El hombre fue condenado a más de 55 años de cárcel, tras demostrarse su autoría en el incendio que acabó con la vida de Olga y Melany.
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