El Banco Mundial considera que los países en vía de desarrollo deben invertir entre el 5% y el 7% de su Producto Interno Bruto (PIB) en infraestructura. Colombia ha invertido entre el 1.8% y el 2.5% en las últimas décadas. Visitamos dos proyectos que demuestran que en Colombia se pueden hacer las cosas bien. Hablamos también con la academia sobre la realidad y los desafíos de la infraestructura en nuestro país, eje fundamental del desarrollo. Conéctese con una nueva entrega de El Proyecto es Colombia , tercera temporada.
Vía Bogotá-Girardot
En el filo del Alto de Canecas, empotrado en la cordillera oriental colombiana, bajando de Bogotá hacia Girardot, se construye uno de los taludes más grandes del país. Terrazas de 1.500 metros de extensión, con alturas que oscilan entre los 80 y 100 metros.
"Son para darles garantía de que cuando llueva, las aguas bajen por esos canales y estén depositándose en la parte inferior y que no afecten la vía como tal", explica Iver Oswaldo Cometa, ingeniero de Vía 40 Express.
Este talud, en el que trabajan 500 hombres, pretende reducir en un altísimo porcentaje el desprendimiento de gigantescas rocas. Al lado de la doble calzada, se construirá una zona de seguridad donde caerá el poco material que desprenda de la montaña.
Publicidad
José Daniel Fernández, gerente técnico de Vía 40 Express, asegura que gran parte de la carretera Bogotá- Girardot, que se extiende a lo largo de 145 kilómetros y por la que se mueven 17 millones de vehículos al año, está en obra.
En la concesión Bogotá-Girardot trabajan 5 mil personas; un porcentaje de ellos se concentra en terminar la construcción del tercer carril de esta carretera. Muy cerca a Bogotá remueven miles de toneladas de tierra para habilitar la vía en pocos meses, un carril que aumentará la carga de vehículos y mejorará el desplazamiento.
Publicidad
Se espera que estén en su totalidad operando en el año 2025.
La Ruta del Sol
La carretera de más de mil kilómetros de extensión que conecta al centro de Colombia con la costa Caribe, hace varios años entró en franco deterioro en algunos de sus tramos.
El que va entre Puerto Salgar, en Cundinamarca, y San Roque, en Cesar, es el más afectado. Sus dos calzadas tienen serios daños que generan constantes accidentes. Hay partes sin construir y, según los conductores, tiene graves problemas de señalización. Su concesión fue liquidada en 2017 por el escándalo de Odebrecht.
"¿Quién se volvió a acordar del mantenimiento de eso? Eso es como caminar por la superficie lunar, solo huecos, nadie aparece, nadie se responsabiliza”, dice Fernando Rey, experto en transporte.
Publicidad
El nuevo ministro de Transporte, William Camargo, quien habló en calidad de presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, aseguró la Ruta del Sol que estará reparada y adecuada en pocos meses.
Colombia es un país que tiene un poco más de 206 mil kilómetros de vías, 16.983 de red vial principal, 44.400 en la red secundaria y 142.284 de vías terciarias.
Publicidad
De los más de 200 mil kilómetros de carreteras en Colombia, tan solo 6.200 son 4G. Se espera que en los próximos años se sumen unos 3.200 kilómetros más, según los datos de la ANI.
Fredy Alberto Reyes, experto en infraestructura de la Universidad Javeriana, dice que el país necesita “terminar los proyectos que ya están en ejecución; es decir, los 29 proyectos de las 4G que fueron planteadas, de eso hay tal vez seis proyectos ya entregados, nueve proyectos con un avance superior al 95% y hay unos cuatro proyectos que tienen serios problemas de ejecución”.
Vías terciarias
Pero Colombia tiene una deuda histórica con la red terciaria, aquella que, sin duda, para este experto, mejorará las condiciones de productividad del campo y es “la que le puede dar la oportunidad de que nuestros campesinos saquen al mercado sus productos y tengan una vida un poco más digna y esos son 142 mil kilómetros que nos faltan por hacer”.
Siete de cada diez kilómetros de carreteras en el país son terciarias. Esta realidad, fractura el progreso económico y social de los campesinos y hace difícil el acceso a los alimentos que produce.
Publicidad
El gobierno pretende rehabilitar 33.102 kilómetros de vías terciarias.
Aeropuertos de Colombia
La ANI tiene planeado a corto plazo el mejoramiento y la ampliación de los aeródromos de Bogotá, Santa Marta, Rionegro -que sirve a Medellín- y Palmira, que sirve a la ciudad de Cali. Para la agencia es prioridad definir el plan para remplazar el viejo y obsoleto Gustavo Rojas Pinilla de la isla de San Andrés.
Publicidad
Después de El Dorado, el aeropuerto Matecaña de Pereira es uno de los más modernos de Colombia, una nueva infraestructura amigable con el medio ambiente, ya que el 50% funciona con energía solar.
Se construyó en 24 meses con una alianza público-privada y hoy es el más importante del Eje Cafetero.
El Matecaña tiene conexiones diarias con ciudades como Miami o Nueva York y el 80% de los pasajeros que llega o sale del Eje Cafetero lo hace por el aeropuerto de Pereira.
Pereira tiene como reto ampliar su aeropuerto, pero por razones de espacio no se puede construir una segunda pista. Por eso se busca una alianza público-privada para asumir la operación del aeródromo de Cartago, ubicado a 20 minutos de la capital de Risaralda, para tener allí una pista alterna que sirva para exportar flores, textiles y café. Expertos dicen que esta inversión disminuirá los costos para exportar productos risaraldenses que actualmente salen por Buenaventura o por El Dorado de Bogotá.
Publicidad
En contraste está el aeropuerto de Cartagena, el Rafael Núñez, que se quedó pequeño para la alta demanda de visitantes y turistas que tiene La Heroica. Solo en 2022 por allí circularon más de 7,2 millones de pasajeros.
La solución para Cartagena está en marcha. Es quizás la apuesta más importante en materia aeroportuaria a corto plazo, la adjudicación de la construcción de un aeropuerto internacional en el corregimiento de Bayunca para atender la alta demanda turística de Cartagena y del Caribe colombiano, que contaría con dos pistas y 100 mil metros cuadrados en instalaciones que estaría construido en dos años a partir de la firma de su contrato.
Publicidad
"La capacidad que tenemos actualmente en Cartagena nos da alrededor de 8,5 millones de pasajeros al año. Con Bayunca esta capacidad se duplica", dice William Camargo.
Por otro lado, para los expertos en infraestructura, si Colombia quiere aumentar su competitividad no puede dejar de invertir en la ampliación del aeropuerto El Dorado de Bogotá, el tercer aeropuerto más importante de América Latina, primero en movimiento de carga en esta zona del planeta y por el que circulan más de 40 millones de pasajeros al año.
Trenes y puertos de Colombia
Colombia inexplicablemente dejó acabar el tren, el sistema de transporte que construyó gran parte del desarrollo de la nación. Ferrocarriles Nacionales quedó sepultado a comienzos de la década de 1990.
Datos de la ANI indican que llevar a los puertos un contenedor cuesta en promedio 2.450 dólares. Si el tren se recupera esta operación se reduciría a 1.800 dólares.
Publicidad
Actualmente, hay una insípida operación del ferrocarril en Colombia, en dos tramos en los que se mueven dos trenes a la semana con carga. El reto es tener a corto plazo tres ferrovías en operación a lo largo de 1.600 kilómetros.
Fernando Rey, experto en transporte, dice que "el tema que en materia férrea es doloroso es que se han presentado 32 propuestas de inversión público-privada y la ANI no ha aprobado una sola. Cuando no hay esa seguridad técnica ni jurídica, pues los inversionistas se van".
Publicidad
Para 1920, cuando el tren empezó a mover el desarrollo de Colombia, se construyeron 1.800 kilómetros de ferrovías, para 1970 esa red se duplicó a 3.600, casi un siglo después, Colombia solo tiene 1.600 kilómetros y muchos de ellos por recuperar.
Para los expertos en infraestructura, no se trata de acabar con el transporte por carretera. El tren, en algunos tramos de la compleja geografía colombiana, puede ser más efectivo que el tractocamión. Por ejemplo, un tren puede mover 6 mil toneladas de carga, equivalente a lo que mueven 250 tractomulas. Los costos de desplazamiento se podrían reducir hasta en un 26% en ferrocarril.
La ANI quiere actualizar la norma férrea vigente desde 1920 y reactivar la circulación del tren de carga en 1.600 kilómetros en tres trazados claves para la producción nacional:
- La primera línea, denominada corredor férreo central, conectará a La Dorada, en Caldas, con Chiriguaná, en Cesar, y finalizará en el puerto de Santa Marta.
- La segunda Línea es la del Pacífico, que arranca en Buenaventura y que se conectará con el corredor central. En pocos meses se resolverá si se une por las montañas del Alto de la Línea, por el norte del departamento de Caldas o sube hasta Antioquia para caer después al Magdalena Medio.
- La tercera línea será Belencito-Bogotá. Tendría a futuro una conexión por Girardot, por el Carare o por Barrancabermeja para conectar con el corredor férreo central.
En tres años deberán estar operando.Transporte fluvial
Otro sistema de transporte que Colombia decidió desaprovechar, según los expertos en infraestructura, es el fluvial, a pesar de tener la red hídrica más importante de Suramérica, un sistema limpio, eficaz y perfecto para mover gran cantidad de carga.
"En eso estamos realmente muy atrasados, en términos del aprovechamiento fluvial que se tiene en los países desarrollados, en Europa y en Estados Unidos", señala Juan Saldarriaga, experto en infraestructura de la Universidad de los Andes.
Publicidad
Para operadores de los puertos como el de Barranquilla, es necesario recuperar el Magdalena como canal de desarrollo para el país, un río que tiene injerencia directa en 130 municipios a lo largo de su recorrido, por el que se mueven solo 4 millones de toneladas al año de carga entre Barranca y Cartagena y eventualmente la puerta de oro de Colombia.
Para esto, Cormagdalena dio el primer paso, adquirir una draga que construirá Cotecmar y que retirará de manera permanente los sedimentos del canal de acceso al puerto a lo largo de 24 kilómetros para facilitar la entrada de grandes buques a Barranquilla, con carga que en determinado momento podría ser embarcada en planchones hacía el centro del país.
Publicidad
Dentro de los proyectos 5G, el Estado colombiano adjudicó la restauración de los ecosistemas del canal del Dique, una gigantesca obra entre Calamar, en Bolívar, y la bahía de Cartagena, obra con la que busca mitigar las inundaciones en esta zona del norte del país y reducir el impacto de los sedimentos que están afectando seriamente la zona de la desembocadura del canal.
Colombia, en materia de infraestructura, se ubica en el puesto 81 entre 141 países, según el World Economic Forum.