Las consecuencias negativas de la pandemia siguen causando estragos a nivel financiero, que afectan principalmente el bolsillo de los ciudadanos. De acuerdo con los analistas, en algunos sectores económicos apenas se está visibilizando el impacto generado por esta crisis que paralizó una parte del mundo, como en el caso de las constructoras y agencias inmobiliarias, que ha traído como resultado el incremento el valor de los arriendos.
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Según el CEO de la página web fincaraiz.com.co, Martín Monzón, el freno en las construcciones a causa de la pandemia, la decreciente entrega de nuevos proyectos inmobiliarios y la alta inflación, son las causas directas de que los arriendos se encuentren tan costosos a nivel mundial, especialmente en países o regiones con alta demanda turística.
Monzón señala que adicional a estas problemáticas, los países están sufriendo fenómenos migratorios para los que no estaban preparados estructuralmente, ya que algunas ciudades se encuentran limitadas por el espacio y no tienen posibilidades de crecimiento hacia los lados. El empresario comenta que la alta demanda y la oferta restringida hace que el valor de los alquileres sea mayor.
Sin embargo, añade que hay países, como en Argentina, donde los arriendos no son una posibilidad viable para los propietarios de inmuebles, debido a que el Estado regula las condiciones de los contratos de renta para beneficiar a las personas locales. “En Argentina se pasó una ley de arriendo muy fuerte, en la cual los arriendos son a tres años y los aumentos son autorizados por el gobierno de manera anual. Esto en un país con una inflación del 100% destruyó el mercado de arriendos”, afirma.
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En este sentido, Monzón asegura que las personas han optado por arriesgarse a alquilar sus viviendas por fuera de la ley, con todas las consecuencias que eso implica. En cuanto a quienes deciden hacerlo de manera legal, agrega que “los arriendos que aumentan una vez al año comienzan desde una base muy alta”.
Por otro lado, el expresidente de Fedelonjas y consultor en vivienda César Augusto Llano explicó que detrás de este fenómeno de incremento en el costo de propiedad raíz se encuentran las medidas contrainflacionistas para estabilizar el mercado financiero. “Que suban los precios no es malo, se está haciendo un ajuste en las medidas macroeconómicas”, argumenta.
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Llano señala que, en Colombia, hay un equilibrio de oferta y demanda entre arrendadores y arrendatarios, pero esta proporción se está afectando con modelos de negocio para el alquiler de inmuebles ocasionales, como Airbnb. “Si yo meto mi propiedad en Airbnb, saco el inmueble de la sociedad para dejarlo al servicio turístico”, ejemplifica.
Pese a esto, el estructurador de proyectos comenta que no solo debe hacerse una regulación a las plataformas que ofrecen este servicio, sino que se debe estimular la oferta para construir vivienda. De esta manera, el mercado podría estabilizarse solo.