En Caquetá, la reciente decisión de Nestlé de cesar sus operaciones ha generado una ola de preocupación entre los ganaderos de la región. Tras más de 50 años de actividad, la multinacional anunció que se retirará debido a una reorganización de su cadena de suministro y a la notable disminución en la compra de leche. Según el comunicado de la empresa, la planta procesadora solo estaba funcionando al 10% de su capacidad instalada.
Piden ayuda del gobierno nacional ante la posible salida de Nestlé del país
Jhovany Santamaría, un ganadero afectado, manifestó su frustración: “Hoy somos 22 mil familias campesinas que producimos leche y el 30% le estábamos vendiendo a Nestlé. Hoy nos vemos desamparados totalmente, una empresa multinacional que se recoge y nos deja viendo pa' lo alto y sin rumbo ninguno. Ya con la pronta ida de Nestlé cerrar sus puertas y dejarnos a nosotros los lecheros con toda esa leche para botarla o soltar terneros o qué vamos a hacer”.
La situación no solo afecta a los productores, sino también a los trabajadores de la planta y a toda la cadena productiva. Manuel Castillo, directivo de la CUT Caquetá, advirtió: “Esto trae consecuencias regresivas para la cadena productiva láctea, es que no solamente se van a afectar los trabajadores que funcionan en Nestlé porque hay transportadores, hay celadores, hay vigilantes, hay el productor ganadero, este año Nestlé ya había suprimido 14 de sus trabajadores de su planta, ahora viene por el resto, que va a pasar con ellos".
Al menos 280 familias ganaderas dependían de la compra de leche fresca por parte de Nestlé. Con la salida de la multinacional, muchos temen caer en la quiebra. Piden apoyo al Gobierno Nacional, que los ayude a buscar estrategias para evitar más afectaciones en la economía.
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La decisión de Nestlé plantea un futuro incierto para la industria láctea en Caquetá, dejando a los ganaderos en una situación crítica y en la búsqueda urgente de alternativas para sostener sus negocios.