La inminencia de un fenómeno de El Niño en Colombia durante el segundo semestre de este año encendió las alarmas en el sector eléctrico, ante el impacto que pueda tener sobre el abastecimiento de energía y las tarifas.
La mayor parte de la energía eléctrica en el país se genera a partir de plantas hidroeléctricas, por lo que el nivel de los embalses es muy importante, pues además de ser una fuente de energía limpia le brindan un soporte confiable al sistema que garantiza que la luz llegue a las casas de los colombianos.
En la actualidad, los embalses están a niveles promedio de 58% de llenado, pero con una sequía extrema y un aumento de la demanda, este 58% se puede bajar a niveles preocupantes, lo que podría ocasionar un racionamiento energético.
“Las hidroeléctricas, las principales fuentes de energía eléctrica en nuestro país están ubicadas en su mayoría sobre la región Andina de Colombia, una de las regiones que puede sufrir mayores afectaciones en términos de la disminución de los niveles hídricos que, por supuesto, alimentan los embalses que nos ayudan a producir energía”, señaló Flover Rodríguez, director de la Asociación Colombiana de Geólogos y Geofísicos de Energía.
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“Nuestro sistema eléctrico y nuestros embalses están en un estado de poca disponibilidad de energía respecto a la demanda, el balance es muy inestable y ante cualquier evento podríamos sufrir un déficit”, aseguró Sandra Fonseca, directora de Asoenergía.
Esta alerta también trae consigo anuncios de posibles precios altos de la energía al tener que prender más plantas térmicas y tener empresas muy expuestas a las volatilidades de los precios, la energía sube de precio y así mismo será cobrada a los usuarios.
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“Hemos tenido días recientes con precios de bolsa superiores a los $550, $600, $650 porque, obviamente, lo que comienza a preverse es que si no hay agua hacia adelante lo que toca empezar a usar es mayor capacidad técnica de generación”, explicó Alejandro Castañeda, director ejecutivo de Andeg.
Pese a este panorama, la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, y el presidente de EPM, indican que no hay alerta de racionamiento por ahora y que las unidades 3 y 4 de Hidroitunago entrarán a respaldar la matriz energética antes del 30 de noviembre.
“Sabemos que va a haber Niño, pero no sabemos cuánto tiempo va a haber Niño, y frente a ese escenario de incertidumbre se considera una buena práctica a nivel global ser precavido y es asumir un Niño largo y guardar la mayor cantidad de agua, eso hace que los efectos tarifarios del Niño arranquen desde hoy”, indicó Jorge Andrés Carrillo, presidente de EPM.
Para XM será necesario que la energía que se genera con combustibles fósiles, incluido el carbón, deberá entrar a respaldar a las hidroeléctricas en este paso de sequías en el país.