El país de América Latina con la edad de pensión más baja: ¿qué puesto ocupa Colombia?

La edad de jubilación es uno de los factores más importantes a la hora de planificar el futuro financiero. En América Latina, las edades para acceder a la pensión varían considerablemente entre cada país, lo que impacta en la calidad de vida y las oportunidades de cada uno de los adultos mayores.

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¿Cuáles son los países de América Latina donde se pensionan más rápido?

Países como Venezuela, Uruguay y Paraguay se posicionan como primeros en la lista, dado que son las naciones que permiten la jubilación a edades más tempranas en comparación a otros países. En lo que respecta a los hombres, deberán tener 60 años y en el caso de las mujeres deberán alcanzar la edad mínima de 55 años.

Colombia se sitúa como el cuarto país donde más rápido es posible obtener la pensión. La edad mínima para jubilarse es de 62 años para los hombres y 57 años para las mujeres. Sin embargo, tras el anuncio de la aprobación de la reforma pensional, las semanas mínimas de cotización varían; 750 semanas de cotización para mujeres y 900 para hombres.

Seguidos se encuentran países como Perú y México, en donde exigen edades más altas para poder jubilarse, establecidos en 65 años tanto para hombres y mujeres.

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Si bien la edad de jubilación es un indicador importante, no es el único factor por considerar al evaluar la situación de los jubilados en América Latina. Para tener una visión completa del panorama, es necesario analizar otros aspectos relevantes:

1. Esperanza de vida: la expectativa de vida al momento de jubilarse juega un papel fundamental. Una mayor longevidad implica un periodo más largo de retiro y, por ende, mayor necesidad de recursos para sostener un estilo de vida adecuado.
2. Sistema de pensiones: la calidad y sostenibilidad del sistema de pensiones del país son determinantes para garantizar ingresos suficientes durante el retiro. Un sistema robusto y bien administrado permite a los jubilados disfrutar de una vejez digna y segura.
3. Condiciones socioeconómicas: las condiciones económicas generales del país, como el nivel de pobreza y la desigualdad, también influyen en el bienestar de los adultos mayores. Un entorno con altos niveles de pobreza y desigualdad puede limitar las oportunidades y el acceso a servicios básicos para los jubilados.