El sector de juegos de suerte y azar en Colombia vive un auge sin precedentes. En 2023, las apuestas totales superaron los 77 billones de pesos, con el fútbol como el deporte rey de las preferencias. Esta tendencia, impulsada por la facilidad de las apuestas en línea y la pasión por el deporte, ha convertido a este sector en una importante fuente de entretenimiento y dinamismo económico para el país.
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Las cifras hablan por sí solas: el gasto anual por consumidor en apuestas alcanzó los $3,1 millones, lo que significa un promedio diario de $8.550. El fútbol, con un 80% de las apuestas, lidera la escena, seguido por otros deportes como el béisbol, especialmente popular en la región de la Costa Caribe.
Para muchos colombianos, las apuestas deportivas son una forma de vivir la pasión por el fútbol con mayor intensidad. Nicolás Farfán, apostador habitual, lo confirma: "Me ha traído ganancias y pérdidas, lo máximo que he ganado ha sido cuatro millones, las pérdidas han sido un poco iguales o superiores".
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El crecimiento del sector también ha traído consigo la necesidad de promover prácticas responsables. Jugar por diversión, conocer los derechos y deberes como jugador, establecer un presupuesto y buscar ayuda en caso de detectar un problema con el juego son aspectos fundamentales para disfrutar de las apuestas de forma segura.
Las apuestas en línea han revolucionado la industria, ofreciendo comodidad y facilidad a los usuarios. En el último cuatrimestre, se registraron 36 millones de transacciones online, una cifra que refleja la creciente preferencia por este canal.
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Con el auge de las apuestas en línea, surge la preocupación por la ilegalidad en algunas plataformas. Es crucial que los jugadores se aseguren de apostar en páginas autorizadas por Coljuegos, que terminan en .co. Estas plataformas garantizan la seguridad de las transacciones y la protección de los usuarios.