Declaración de renta 2025: ¿cuál es el promedio de sueldo mensual para tener que declarar?

La declaración de renta es un tema que genera muchas dudas entre los contribuyentes colombianos. Con la llegada del 2025, es crucial entender los nuevos requisitos y topes establecidos por la DIAN para determinar si usted está obligado a presentar esta declaración.Para el año gravable 2024, que se declara en 2025, la DIAN ha fijado ciertos umbrales que determinan quiénes deben presentar la declaración de renta. Uno de los criterios más importantes es el ingreso mensual promedio. Si usted se pregunta si su sueldo lo obliga a declarar, siga leyendo para obtener una respuesta clara y detallada.(Lea también: El límite de dinero que debe tener en Nequi y Daviplata para no declarar renta en 2025)¿Cuál es el sueldo mensual promedio que obliga a declarar renta en 2025?Para el 2025, la DIAN ha establecido que aquellos contribuyentes cuyos ingresos brutos anuales superen los 1.400 UVT (Unidades de Valor Tributario) están obligados a presentar la declaración de renta. En términos monetarios, esto equivale a un ingreso anual de aproximadamente $69.718.600 COP.Dividiendo esta cifra entre los 12 meses del año, obtendrá un ingreso mensual promedio de alrededor de $5.809.883 COP. Es importante tener en cuenta que este cálculo se basa en el valor de la UVT para 2025, que ha sido fijado en $49.799 COP. Si su sueldo mensual promedio supera esta cifra, es muy probable que deba presentar la declaración de renta.Otros criterios para la declaración de rentaAdemás del ingreso mensual promedio, existen otros criterios que pueden obligarlo a declarar renta en 2025. Estos incluyen:Patrimonio bruto: si al 31 de diciembre de 2024 supera los 4.500 UVT, es decir, aproximadamente $224.095.500 COP.Consumos con tarjeta de crédito: si sus consumos con tarjeta de crédito durante el año 2024 superan los 1.400 UVT, equivalentes a $69.718.000 COP.Compras y consumos: si el valor total de sus compras y consumos en 2024 supera los 1.400 UVT es decir, $69.718.000.Consignaciones bancarias: si el valor total de sus consignaciones bancarias, depósitos o inversiones financieras en 2024 supera los 1.400 UVT.¿Cómo prepararse para la declaración de renta?Puede parecer una tarea abrumadora, pero con la información correcta y una buena organización, puede simplificar el proceso. Hay algunos pasos que puede seguir para realizar este procedimiento y evitar multas:Reúna todos los documentos necesarios: esto incluye certificados de ingresos y retenciones, extractos bancarios, comprobantes de pagos de impuestos, entre otros.Utilice herramientas y calculadoras en línea: existen diversas herramientas en línea que pueden ayudarlo a calcular sus ingresos y determinar si está obligado a declarar.Consulte a un contador: si tiene dudas o su situación financiera es compleja, es recomendable consultar a un contador para asegurarse de cumplir con todas las obligaciones fiscales.(Lea también: ¿Cómo saber si debe declarar renta en 2025 por sus movimientos en Nequi? Ojo con los montos)¿Qué sucede si no realiza la declaración de renta?No presentar la declaración de renta puede acarrear serias consecuencias financieras y legales. La DIAN establece sanciones para quienes no cumplan con esta obligación en el plazo establecido. Algunas de las consecuencias incluyen:Sanciones económicas: la DIAN puede imponer multas que varían según el tipo de contribuyente y el monto de los ingresos no declarados. Estas sanciones pueden incluir intereses de mora y por extemporaneidad, que oscilan entre el 1% y el 5% del valor de los impuestos no declarados.Procesos de cobro coactivo: la DIAN puede iniciar procesos de cobro coactivo para recaudar los impuestos no declarados, lo que puede incluir embargos de cuentas bancarias y bienes.Inhabilitación para contratar con el Estado: los contribuyentes que no presenten la declaración de renta pueden ser inhabilitados para contratar con el Estado, lo que puede afectar a empresas y profesionales independientes.Pérdida de beneficios tributarios: no declarar renta puede resultar en la pérdida de beneficios tributarios, como deducciones o exenciones, que podrían reducir la carga impositiva.