El gremio de los constructores advirtió que, por los altos costos del acero debido al alza del dólar, están en riesgo miles de viviendas que los hogares ya están pagando y que fueron compradas sobre planos.
Noticias Caracol conoció una carta enviada por la directora de Camacol, Sandra Forero, a la ministra de Vivienda en la que alerta que por los altos costos del acero están en riesgo los proyectos de 250.000 familias.
- Precio del dólar en Colombia rozó los $4.400 este miércoles: ¿a qué se debe este sorpresivo aumento?
"Eso puede impactar la viabilidad de los proyectos y lo que están haciendo los constructores es hablar con cada uno de los compradores para explicar esta situación y los proyectos están en altísimo riesgo de que no se pueden construir", indicó Forero.
En Barranquilla, los constructores dicen que los proyectos se están viendo afectados no solamente por los altos costos del acero, sino de otros materiales importados, que han subido con el dólar.
Publicidad
Eduardo Cerón, ingeniero técnico de una constructora, explica qué ha subido: “Las bombas contra incendio, que todos son equipos importados; los ascensores, que son equipos importados. Hay otros insumos como de materias primas, otros proveedores como la cementera Argos nos ha mencionado que los precios del carbón han subido y eso también se traza en dólares”.
Habitantes de Barranquilla, como Stephanie Cariada, que pensaba estrenar vivienda este año, dice que ahora lo está pensando. Y tendría razón, pues las constructoras dicen que mantendrán el precio a quienes ya hayan firmado promesa de compraventa, pero los altos costos de los insumos se verán reflejados en los nuevos compradores.
Publicidad
Muchos constructores en Barranquilla están esperando que baje la marea, que los costos se normalice, pues ahora los precios están por las nubes.
Preocupación en Santa Marta por construcción de viviendas de interés social
En Santa marta advierten también que las viviendas de interés social tienen un tope en su precio y con el acero por las nubes el panorama es incierto.
"Lo complicado es que no se puede subir el tope mínimo que hay de viviendas de interés social porque se sale del rango y se pierde el tipo de subsidio; y se ven afectados tanto los clientes como constructores", indica el constructor Juan Vives.
A esto se suma que más del 50% de las viviendas que actualmente se construyen requieren de manera urgente el acero.
Publicidad
"En Santa Marta se encuentran en fase de construcción más de 6.850 unidades de viviendas, de las cuales más del 50% de esa cifra se encuentran en una fase de cimentación y estructura, que es cuando este insumo tiene mayor demanda", dice Javier Quintero, gerente de Camacol Magdalena.
Actualmente, en la ciudad hay 34 frentes de obras lo que genera 18 mil empleos en la región.
Publicidad