Novak Djokovic usó una estrategia que no gustó, en el Masters 1.000 de París: recibió duras críticas

Novak Djokovic se recuperó para derrotar a Andrey Rublev por 5-7, 7-6 (7/3) y 7-5 en una apasionante semifinal del Masters 1.000 de París el sábado, ganando una oportunidad de alcanzar su séptimo título en la final contra Grigor Dimitrov.

El número uno del mundo se apoyó en su inquebrantable capacidad de recuperación para remontar un set en contra antes de sellar la victoria cuando Rublev, quinto cabeza de serie, cometió una doble falta en el punto de partido.

Djokovic sigue invicto en nueve semifinales en Bercy y amplió su racha de victorias a 17 partidos , una racha que incluye su 24º título de Grand Slam en el US Open.

Su única derrota en los últimos 31 partidos fue en cinco sets frente a Carlos Alcaraz en la final de Wimbledon, lo que arruinó su intento de conseguir un Grand Slam en el calendario.

Djokovic rompió para empezar el partido, pero Rublev le devolvió el golpe en el siguiente juego , con un revés flojo del serbio al final de un largo peloteo.

El primer cabeza de serie sacó con garra para escapar de una desventaja de 0-40 y mantener el 4-4, pero Rublev aprovechó su siguiente oportunidad con Djokovic intentando mantenerse en el set.

Rublev castigó un débil segundo servicio para conseguir un punto de set, y pronto se puso por delante cuando Djokovic falló un intento de dejada.

Djokovic luchó contra un punto de ruptura al principio del segundo set, pero no pudo convertir ninguna de sus cuatro oportunidades ante un Rublev resistente.

El tenista de 36 años se aferró a la victoria en un duro punto dictado por Rublev para colocarse 4-2 arriba en el tie-break , y luego logró una devolución ganadora al saque de su rival para disponer de tres puntos de set.

Sólo necesitó uno, con un ace fuera de banda, para enviar el partido a un tercer set.

Djokovic recibió tratamiento en la espalda entre sets, pero no pareció resentirse y consiguió dos puntos de ruptura en el cuarto juego. Rublev resistió hasta que Djokovic aumentó la presión y el ruso sacó para mantenerse en el partido.

Djokovic realizó un sensacional golpe ganador de revés al comienzo del último juego e impuso su voluntad ante un Rublev vacilante, que lanzó su raqueta con disgusto después de que una doble falta sellara su destino.

La superestrella serbia buscará el domingo su 40º título de Masters 1.000, todo un récord, ante un rival que sólo participa en su segunda final de este tipo.