El español Carlos Alcaraz, primer cabeza de serie del Masters 1.000 de Shanghai, superó "uno de los partidos más duros de este año" para meterse en los dieciseisavos de final del torneo, al vencer al británico Daniel Evans por 7-6 (7/1) y 6-4.
El español es el único de los cuatro cabezas de serie del torneo que queda después de que el griego Stefanos Tsitsipas cayera frente al francés Ugo Humbert por 6-4, 3-6 y 7-5.
El partido de Alcaraz, de casi dos horas y media de duración, fue ferozmente físico, con Evans, número 33 del mundo , dando lo mejor de sí mismo, llegando a ir ganando por tres juegos en el primer set.
Hubo largos y duros peloteos que dejaron a los espectadores boquiabiertos. Allí, esto hizo que el número dos del mundo asumiera gradualmente el control, ganando ampliamente el desempate del primer set.
Gana Humbert y Lahyani anuncia: "Game, set and match, Tsitsipas."
— Set Tenis (@settenisok) October 9, 2023
Faltó un "Correction!"
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"Ha sido probablemente uno de los partidos más duros que he jugado este año", declaró Alcaraz, de 20 años, tras el encuentro.
Alcaraz jugará, ahora, contra el búlgaro Grigor Dimitrov, que antes se sobrepuso a un aguacero torrencial y a un rival muy igualado como el ruso Karen Khachanov para ganar por 7-6 (8/6) y 6-4.
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Otros resultados del Masters 1.000 de Shanghai
Alcaraz, dos veces ganador de Grand Slam, es el favorito para hacerse con el título en ausencia del número uno del mundo, Novak Djokovic, y espera aprovechar su estancia en China para recortar distancias con el serbio al frente de la clasificación de la ATP.
Y sus principales rivales se han ido reduciendo a medida que avanzaba la competición.
El segundo cabeza de serie y defensor del título, Daniil Medvedev, cayó el domingo contra Sebastian Korda (26º), y el tercero, Holger Rune, fue eliminado una ronda antes.
El griego Tsitsipas se unió a ellos, tras un partido en el que el jugador de 25 años nunca pareció encontrar una forma consistente.
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El número seis del mundo parecía nervioso tras perder el primer set, pero recuperó la compostura para responder con el segundo.
Pero cuando Humbert, número 34 del mundo, volvió a ponerse por delante en el tercero, Tsitsipas pareció perder la calma , hablando airadamente consigo mismo y golpeando una pelota al aire en señal de exasperación.
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Humbert aguantó el arreón del griego en los últimos compases del tercer set hasta que Tsitsipas mandó la pelota a la red al final del punto de partido.
"Al final estaba un poco apretado, intenté moverme un poco en los dos últimos juegos, y estoy muy orgulloso de haberlo hecho", dijo el francés.