Camila Osorio venció a Ana Bogdan y está en segunda ronda de Roland Garros

Remando de atrás para adelante, en eso se resume la victoria de Camila Osorio, quien no empezó de la mejor manera el juego y poco a poco fue tomando ritmo. En más de dos horas de partido y después de tres sets, la colombiana se llevó la victoria frente a Ana Bogdan en la primera ronda de Roland Garros.

Osorio fue de menos a más, por momentos se vio vulnerada en su saque, pero al final los quiebres sobre el servicio de la rumana fueron claves para culminar ganando 6-3, 3-6 y 7-5.

Las primera manga comenzó con un ambición de parte y parte que se tradujo con un quiebre de entrada para cada una. Luego las cargas se igualaron y todo desentonó a favor de Bogdan a la altura del octavo game tras quedarse con el servicio de Osorio. La colombiano se vino abajo y terminó cediendo un 6-3 en 39 minutos de partido.

Para el segundo set, el juego no cambió mucho, sin embargo, tanto la colombiana como la rumana mejoraron en su servicio y a partir de allí fueron consolidando su nivel en cancha. Tal cual como pasó en el primera salida, en el octavo juego se marcaron diferencias, solo que esta vez fue para Osorio, quien se fue de largo con un segundo quiebre e igualó todo con un 6-3.

En el tercer y definitivo set, la que arrancó con toda fue Osorio, quien inició que quebrando y estuvo 2-0 en el marcador. En el tercer juego vino el descuento de Bogdan, sin embargo, después vino la colombiana con un nivel superlativo, pues ganó tres games seguidos y se puso 5-1 arriba.

En ese punto, cuando parecía que la colombiana tenía el triunfo en el bolsillo, la rumana reaccionó y no se dejó amilanar a pesar de ir tan abajo en el 'tablero'. Bogdan afinó su servició y se llevó el saque de Osorio en dos oportunidades, para emparejar el set 5-5.

En ese punto, la cucuteña se sintió incomoda en cancha, no obstante, tal como la hecho en sus más recientes torneos, sacó la casta en los momentos difíciles y terminó ganando el set 7-5 tras volver a quebrar el servicio de Bogdan.

Sonrisa en el rostro y aplauso con la raqueta de la colombiana, luego de un encuentro que no fue fácil y que sin duda fue una buena medida para esta aventura en el cuadro principal de Roland Garros.