Emiliana Arango ha sido la gran sensación, esta semana, en el WTA 1.000 de Guadalajara luego de alcanzar los octavos de final, este martes. En su primera participación en torneos de esta categoría, la antioqueña no se ha 'achicado' y ha sacado a relucir su mejor versión.
A sus 22 años, Arango espera seguir su camino en el torneo mexicano y la página oficial de la WTA contó algunos detalles de su vida. Acá se los presentamos.
Su primer gran torneo
El primer gran logro profesional de Arango se produjo en Bogotá en 2018. Siendo una joven de 17 años clasificada en el puesto 510, obtuvo su primera victoria en el Top 100 al vencer a Verónica Cepede Royg en la primera ronda. Después, siguió triunfando al derrotar a Jasmine Paolini y llegar a sus primeros cuartos de final.
Sin embargo, su ascenso meteórico se vio bruscamente detenido cuando una lesión en la cadera la obligó a retirarse en su enfrentamiento con la eventual campeona Anna Karolina Schmiedlova. Esta lesión la dejó fuera de competición durante seis largos meses.
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La pandemía lo cambió todo
Después de haber caído fuera del Top 1000 en agosto de 2019, Arango luchó por regresar al borde del Top 500 en marzo de 2020.
"Estando a punto de recuperar mi mejor nivel, la pandemia de COVID-19 llegó y eso no fue una experiencia agradable para nadie", añadió. "Luego, justo cuando estaba jugando muy bien de nuevo, sufrí una lesión en la rodilla que requirió más tiempo de recuperación. Durante la mayor parte de 2022, no me sentí segura con mi juego, mi rodilla o mi salud en general".
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Arango sufrió otra pausa de siete meses, desde noviembre de 2021 hasta mayo de 2022, lo que tuvo un impacto negativo en su ranking. A pesar de haber alcanzado el puesto 235 a finales de 2021, un año después se encontraba de nuevo en el puesto 444. No obstante, esta serie de desafíos finalmente contribuyó a forjar su determinación.
La familia siempre cerca
Los momentos más destacados de la temporada 2023 de Arango incluyen sus primeras victorias en las rondas clasificatorias de los Grand Slam en Roland Garros, Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos, experiencias que ella describe como emocionantes y emocionantes. Coincidentemente, su tío se encontraba de vacaciones en Londres durante Wimbledon, y el éxito de Arango requirió que extendiera su estancia un día más.
Este fue un momento de cierre de un ciclo para Arango, cuya familia, especialmente la parte de su madre, desempeñó un papel crucial en el apoyo de su carrera. Las dificultades derivadas de su lesión ocurrieron antes de que alcanzara el Top 200, lo que significa que pasó más de un año sin ganar dinero en premios, pero su familia estuvo allí para respaldarla.
"Me considero extremadamente afortunada de tener una familia que me respalda", enfatizó. "Comenzando por mi madre, sus padres, sus hermanos, todos contribuyeron de alguna manera. No tengo palabras suficientes para expresar mi gratitud. Sin ellos, no estaría donde estoy hoy. Ellos conocen mi historia y cómo llegué hasta aquí".
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La única deportista de la familia
Aunque la familia de Arango le brindó su apoyo, no eran realmente personas orientadas al deporte. De hecho, su incursión en el mundo deportivo se produjo debido a esta particularidad.
"Nadie más en mi familia practicaba deportes", comentó. "En realidad, mi hermano mayor tomó algunas clases y yo tuve que acompañarlo. Pero resultó que él no tenía talento para eso, y el entrenador sugirió que yo tomará su lugar. Así que, él dejó de hacerlo, y yo continué. Los deportes nunca fueron realmente su interés, y en ese entonces, yo no tenía ningún deseo de participar en competencias deportivas. Pero ahora, incluso planifica sus vacaciones en función de mis torneos".
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No obstante, Arango no ha renunciado a la idea de involucrar a su familia en el deporte. En la actualidad, reside en Miami junto a su madre, Juliana, y su "pequeño" compañero, Oreo, un pastor australiano en miniatura de 4 años. En la actualidad, tiene la intención de persuadir a su madre, a pesar de su reticencia, para que se una a ella en la experiencia de remar en kayak.
Su relación con Camila Osorio
Tres años después de los cuartos de final de Arango en Bogotá, otra adolescente colombiana emocionó a su público local como comodín clasificada fuera del Top 100. En 2021, Camila Osorio reclamó el título y desde entonces se ha establecido firmemente en la gira.
La pareja se conoce desde hace casi toda su vida.
"Nos conocimos cuando ella tenía quizás 7 años y yo 8", dijo Arango. "Jugamos este torneo juvenil en Colombia y nos enfrentamos en la final. No había oído hablar de ella, pero todos me decían: 'Oh hombre, vas a perder, es tan buena que no tienes idea'. Recuerdo haber dicho: 'No tengo idea de quién es esta chica, pero no estoy perdiendo'. Simplemente tenía en mi cabeza que no había manera y la conseguí esa vez.
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*Con información de la WTA*
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