Rigoberto Urán será uno de los grandes ausentes en la delegación colombiana para los Juegos Olímpicos de París 2024 , por la gran ilusión que tenía el corredor antioqueño de estar en sus quintas juntas. Sin embargo, para el ciclismo de ruta, nuestro país solo tenía dos cupos y el hombre de Urrao no fue elegido por Carlos Mario Jaramillo, entrenador nacional.
Eso sí, es grande el recuerdo que tiene Urán sobre los Juegos Olímpicos, donde estuvo muy cerca de quedarse con el título pero se tuvo que conformar con la medalla de plata, en esta prueba que no tenía un recorrido acorde a sus capacidades y que estaba diseñado para para el triunfo del local Mark Cavendish.
En los Juegos Olímpicos de Londres 2012, la prueba de ciclismo en ruta masculina se convirtió en un escenario épico donde Rigoberto Urán, de Colombia, emergió como uno de los protagonistas destacados. La carrera, que abarcó un desafiante recorrido de aproximadamente 250 kilómetros a través de las emblemáticas calles de Londres y sus alrededores, fue un verdadero test de resistencia y estrategia.
Urán, conocido por su habilidad táctica y su capacidad para leer la carrera, se mantuvo en el grupo principal durante la mayor parte del recorrido. A medida que la competencia se intensificaba en los últimos tramos, Urán mostró su fortaleza al posicionarse estratégicamente para los momentos cruciales.
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El momento decisivo llegó cuando Urán se encontró en una fuga determinante junto con Alexander Vinokourov de Kazajistán. Esta pareja dinámica no solo resistió los embates del pelotón perseguidor, sino que también empezó a planear el sprint final que definiría las medallas.
En la recta final hacia el Mall de Londres, Urán desató todo su potencial en un sprint formidable, compitiendo codo a codo con Vinokourov por la codiciada medalla de oro. Aunque Vinokourov logró despegarse en los metros finales, Urán aseguró la medalla de plata con una actuación impresionante que destacó su habilidad para enfrentar la presión de una competencia tan exigente.
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El podio fue el justo reconocimiento a la tenacidad y el talento de Rigoberto Urán, con Alexander Kristoff de Noruega llevándose la medalla de bronce. La actuación de Urán no solo hizo historia para el ciclismo colombiano, sino que también capturó la admiración de espectadores de todo el mundo, quienes presenciaron un emocionante capítulo en la historia olímpica del ciclismo en ruta.